LOLA MORA

LOLA MORA VUELVE AL PALACIO DEL CONGRESO

UNA DE LAS FOTOS MAS LOGRADAS DE LA ARTISTA

                    Los cuatro grandes grupos escultóricos de Lola Mora fueron instalados en 1906 a ambos costados de las escalinatas de acceso en el frente sobre la avenida Entre Ríos del Palacio de las Leyes. En 1915 fueron desterrados del lugar –ya que a varios legisladores de la época les molestaban los desnudos–, y tras un período de estar guardados en depósitos municipales, trasladados a la provincia de Jujuy, donde sí fueron recibidos con beneplácito.

Hoy vuelven al lugar de donde nunca se deberían haber retirado.

Los dos los grupos de la izquierda de las escalinatas del frente del Congreso, estaban compuestos por las alegorías a “La Libertad” y a “El Comercio” (o el Progreso).

La primera, tiene el busto descubierto y sobre la cabeza un pequeño gorro frigio; los paños de la vestimenta, cubriendo el cuerpo desde la cintura, transparentaban las formas de la Libertad, alegoría que insinuaba un movimiento.

La otra pieza de ese grupo representaba al Comercio en la figura de un Mercurio en movimiento, levemente cubierto por una tela y adelante dos leones –parado el de la derecha y acostado el de la izquierda– formaban parte del grupo, con simbolismo desconocido.

"LA JUSTICIA" UNA DE LAS ESTATUAS RECUPERADA

El otro conjunto, a la derecha de la escalinata, estaba integrado por tres alegorías: la primera, masculina, representaba “El Trabajo”, en una clara alusión a la agricultura. En el centro una figura femenina, “La Paz”, insinuando un paso adelante con el pie derecho, con un seno al descubierto, acompañaba con el brazo derecho el movimiento de las piernas, sus formas destacadas por los pliegues de su vestimenta.

La última figura, “La Justicia”, tenía medio cuerpo al desnudo y de la cintura hacia abajo una larga túnica. Sostenía con la derecha la espada enhiesta de la justicia, con la izquierda la clásica balanza y sobre su cabeza lucía una corona.

Esta embestida contra la obra de Lola Mora era la continuación de la desatada con la “La Fuente de las Nereidas”, que originalmente estaba destinada a adornar la Plaza de Mayo, el lugar desde donde se ejercía el poder político, pero que terminó desterrada a un sitio de extramuros, la Costanera Sur.

 El embate en el Congreso en 1913 fue liderado por el diputado radical Delfor Del Valle, que calificó a las esculturas de “adefesios que insultaban la memoria de los próceres que pretenden inmortalizar”.

 Mucha agua corrió bajos los puentes durante un siglo, y en el año 2012 nuevas gestiones lograron que las míticas estatuas volvieran al lugar de origen.

El objetivo de la actual presidencia de la Cámara de Diputados es que en el transcurso del año 2013 las obras de Lola Mora vuelvan a relucir en la explanada del Congreso Nacional, como símbolo de la recuperación del patrimonio artístico de los argentinos. En una Carta Internacional sobre la Conservación y la Restauración de los Monumentos y los Sitios del año 1964, el Segundo Congreso de Arquitectos y Técnicos de Monumentos Históricos en Venecia expresaba: “Portadores de un mensaje espiritual del pasado, las obras monumentales de cada pueblo son actualmente el testimonio vivo de sus tradiciones seculares. La humanidad, que cada día toma conciencia de la unidad de los valores humanos, las considera como un patrimonio común, y pensando en las generaciones futuras, se reconoce solidariamente responsable de su conservación”.

Mediante convenio firmado entre el Gobierno de la provincia de Jujuy, el Gobierno nacional y el Congreso de la Nación, se determinó la confección de dos juegos de réplicas de las estatuas de Lola Mora, que forman parte del patrimonio cultural. Un primer juego será emplazado en el Congreso de la Nación, mientras que el segundo reemplazará a las obras originales ubicadas en torno de la Casa de Gobierno de Jujuy. Las obras originales serán puestas a cubierto en lugar aún no determinado, para su preservación y conservación.

Casi un siglo después, en el marco de las obras del PRIE y gracias a la disponibilidad de herramientas tecnológicas de última generación y a la colaboración del Gobierno de la provincia de Jujuy, se están construyendo calcos exactos de las esculturas originales.

 Las esculturas de Lola Mora fueron escaneadas con tecnología no invasiva de última generación en enero de 2013. En los meses siguientes, se realizó el procesamiento digital de los escaneados y el recorte digital de cada una de las figuras tridimensionales para el diseño de los moldes digitales, tarea que debía resolver el difícil problema de los cálculos de desmolde de figuras morfológicamente muy complejas. Actualmente se están imprimiendo los moldes con fresadoras de última generación en el taller Fabrinco. Los moldes de las esculturas, tallados en una espuma de poliuretano rígida de alta densidad, serán enviados luego a los talleres de escultura donde se colarán por partes y se procederá finalmente al armado de las figuras.

La idea es que las obras sean inauguradas hacia mediados de noviembre en un importante acto en el que se espera la presencia de la Presidenta Cristina Fernández, ya recuperada de su convalecencia.

Marta Romero