jueves, 2 de abril de 2015

ALBERTO CLOSAS



Recordando la estampa del galán Alberto Closas


CON AMELIA BENCE Y CON DELIA GARCÉS


En España creían que era argentino, pero no era así, porque Alberto Closas debió dejar su Cataluña natal y partir al exilio (nació el 30 de octubre de 1921 en Barcelona) con su familia. Su padre era jurisconsulto. Primero embarcaron a Chile y luego llegaron a la Argentina, donde hizo sus primeras composiciones.
Margarita Xirgu fue su maestra; ella le abrió un mundo natural y simplemente se hizo actor. Se destacó en el clásico Doña Rosita la soltera, y después en numerosas obras que resultaron ser éxitos como Pato a la naranja. Su historia es la historia del teatro contemporáneo nacional.
En 1955 conoció a Luis Sandrini, que siendo productor y empresario además de actor, lo consagró en la obra Prontuario.
En los años 70 puso en marcha un proyecto con renovada energía: Las mariposas son libres, que encarnó con Susana Giménez.
De entre sus obras en épocas del cine de oro están: La honra de los hombres, Historia de una mala mujer (con María Duval), El pecado de Julia (con Aída Luz), María Rosa, Mi mujer está loca y Romance en tres noches (con Amelia Bence), La gata (con Sabina Olmos), Tierra del Fuego (con Norma Giménez), La vendedora de fantasías (con Mirtha Legrand), El otro yo de Marcela (con Delia Garcés y Diana Maggi), Ensayo final (con Nelly Panizza) y La dama del mar (con Zully Moreno).
Con enorme pesar Closas debió retirarse de la actuación, y así lo anunciaba un cable que apareció en los diarios de la época: “Alberto Closas debió suspender funciones en Madrid, en el Teatro Alcázar, junto a Amparo Rivelles en El canto del cisne, debido a una afección pulmonar; el médico le recetó largos meses de reposo absoluto”. Retirado así forzadamente, y en un recorrido por su fructífera vida recordaba su aprendizaje con Xirgu, el nacimiento del Teatro Experimental de la Universidad de Chile, sus largas vivencias en las charlas de café en Buenos Aires, sus amigos, sus amores… Lamentablemente falleció el 19 de septiembre de 1994, en Madrid.
Algunas generaciones recordarán por siempre a un galán de ayer, a quien desde estas páginas rendimos un tributo hoy, como destacada figura del teatro, del cine y la televisión, donde dejó huellas imborrables.

Natan Blum






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