NACE EL GAUCHO JUAN
BAUTISTA BAIROLETTO
“EL
ROBIN HOOD DE LAS PAMPAS CRIOLLAS”
“Te vieron mis ojos pibes
encendidos y asombrados”
Héctor Negro
En Argentina y en
el mundo, desde la literatura y hasta la
sociología fueron recogiendo hechos puntuales y
leyendas que retroalimentaron el mito y las historias reales de ciertos
personajes reducidos muchas veces a la categoría de bandidos rurales, o
simplemente bandidos, forajidos proscriptos por una ley muchas veces creada en
forma caprichosa y aplicada por jueces formateados en un sistema no siempre
justo y equitativo, apañado generalmente por
sectores de un oscuro supra poder en las sombras y también a plena luz.
Bairoletto es uno
de los protagonistas más conocido y destacado de esta
camada de figuras a semejanza de Robin Hood, arquetípico de héroe y forajido del folclore medieval inglés, inspirado por Ghino
di Tacco y considerado el vengador de los sufrimientos del pueblo.
Su figura de justiciero fuera de la ley hizo que
se vuelva popular, amparado por los humildes en su vida y venerado tras su
muerte.
LA LEY… SIEMPRE LA LEY…
No siempre “la Ley” fue ni es representativa
de la imparcialidad y ecuanimidad, muchas veces se impregna de los valores
contaminados del legislador y del juez que deba aplicarla. Valga recordar el Código Rural de la
provincia de Buenos Aires de mediados de la segunda mitad del siglo XIX, que transcribe textualmente disposiciones de
sometimiento casi feudales para la población nativa.
Se condenaba lo que denominaban
"vagancia" y se obligaba a los pobladores sin recursos a solicitar
autorización a las autoridades, hasta para transitar por la campaña. Aquel
paisano que no portara su "libreta de conchabo" era considerado mal
entretenido y perseguido tenazmente por la partida. Estas disposiciones
adquieren mayor y mejor control sobre los "vagos" al intensificarse
la producción agropecuaria en las dilatadas llanuras recién conquistadas al
indio.
AFICHE DE LA PELICULA |
“TRAS LOS RASTROS
DEL BANDOLERO SOCIAL”
Distintos historiadores se
ocuparon del tema, aunque tal vez el más notorio fuera el inglés Eric J. Hobsbawm que abordó profundamente la
problemática del “Bandido Rural” desde sus múltiples facetas, sociales,
culturales, religiosas y desde el mismo mito popular.
Escribió en 1959 un texto fascinante sobre el
bandolero social, ampliado luego en su ensayo Bandits (1969).
Su
hallazgo fue mostrar la universalidad del mito de Robin Hood: el salteador
rural empujado fuera de la ley por la injusticia y erigido en héroe de los
pobres que se reproduciría con asombrosa uniformidad en las culturas campesinas
de cualquier época y latitud. Partiendo de la saga de los "buenos
bandidos" del Mediterráneo, Hobsbawm registra personajes similares en toda
Europa, China, África y, por supuesto, la América. Su teoría distingue como
subtipo al "vengador", cuyo rasgo más saliente no es tanto ayudar a
los campesinos sino golpear a sus opresores, lo cual brinda a los oprimidos una
gratificación psicológica; caracteriza bandas de jinetes como los haiduks
húngaros, que formaron rudimentarias guerrillas de liberación nacional (un
equivalente podrían ser nuestras montoneras); y trata como una derivación el
"cuasi-bandidismo" ideologizado de los anarquistas expropiadores.
Para Hobsbawm, tales figuras expresan una forma
primitiva o pre política de protesta, propia de las comunidades agrarias
arcaicas, cuyo equilibrio se rompe por la penetración del capitalismo; y los
bandoleros estarían condenados a extinguirse en la medida en que se afirma el
Estado y surgen los sindicatos y partidos modernos.
Antón Blok, historiador de la mafia siciliana,
cuestionando las fuentes en que abrevaba Hobsbawm, enfatizó que algunos
bandoleros "heroicos" terminaron actuando al servicio de los
poderosos. Aunque Hobsbawm había descripto la complejidad del juego de
intereses en que se insertaba el bandido, llevándolo a veces a pactar con los
dueños del poder, hoy admite parcialmente la crítica de Blok y reconoce que su
trabajo inicial se apoyó en fuentes folklóricas o literarias sin confrontarlas
con investigación documental de cada caso. No obstante, gran parte de esa tarea
la han cumplido los historiadores que se guiaron por su teoría.
Hobsbawm acepta asimismo las críticas que
señalaron que el bandolero social aparece en áreas rurales más modernas, en
contextos capitalistas donde no hay un campesinado tradicional (como lo
muestran, en la Argentina del siglo XX, las andanzas
de Bairoletto o Mate Cosido), si bien ello se da cuando existe una memoria
popular de simpatía por los bandidos populares (algo que, en el caso argentino,
provendría del pasado gauchesco).
Hugo Horacio Chumbita (1940, Santa Rosa, La Pampa) es quien más estudió y difundió el tema en
nuestro país. Félix Coluccio
(1911-2005) no fue ajeno al tema de los cultos, devociones populares e
investigaciones folclóricas.
No solo
la literatura, sino también las artes y el canto popular trataron el tema, así
como el cine y la poesía.
León Gieco enumera
en su poema “Bandidos Rurales” a algunos de los tantos que poblaron la pampa,
la selva y las montañas de nuestro país.
TUMBA DE BAIROLETTO EN GRAL. ALVEAR MENDOZA |
“…Martina
Chapanai, bandolera de San Juan,
Juan Cuello, Juan Moreira, Gato Moro y Brunel,
El Tigre de Quequén, Guayama el Manco Frías,
Barrientos y Velázquez, Cardoso y Cubillas,
Gaucho Gil, José Dolores, Gaucho Lega y Alarcón,
bandidos populares de leyenda y corazón
Queridos por anarcos, pobres y pupilas de burdel
Todos fuera de la ley, todos fuera de la ley…”
Juan Cuello, Juan Moreira, Gato Moro y Brunel,
El Tigre de Quequén, Guayama el Manco Frías,
Barrientos y Velázquez, Cardoso y Cubillas,
Gaucho Gil, José Dolores, Gaucho Lega y Alarcón,
bandidos populares de leyenda y corazón
Queridos por anarcos, pobres y pupilas de burdel
Todos fuera de la ley, todos fuera de la ley…”
JUAN BAUTISTA BAIROLETTO
Hijo de una pareja
de inmigrantes italianos, nació en Santa Fe el 11 de noviembre de 1894. Su familia
se radicó en la provincia de La Pampa, en una zona triguera que abarcaba Castex y
Monte Nuevo. Desde joven tuvo problemas con la policía, al matar a un comisario
de la ciudad de Eduardo
Castex,
provincia de La
Pampa,
llamado Elias Farach, en una disputa amorosa por una prostituta del lugar. A
partir de allí deberá vivir prófugo de la justicia.
Debe moverse en
ambientes peligrosos como casas de juego y prostíbulos. Fue asaltante de
caminos, sosteniendo tiroteos con la policía de Castex y otras localidades de
La Pampa y provincias vecinas, planificó resonantes asaltos a bancos y
hacendados. Era considerado el vengador de los sufrimientos de sus amigos y su
figura de justiciero fuera de la ley hace que se vuelva popular, convirtiéndose
en un mito.
La gente lo ayudaba
a huir, y cuando se refugiaba en un lugar le hacían llegar mensajes para
prevenirlo, le proporcionaban alimentos, abrigo y cuidados. Como corresponde a
la leyenda robaba a los ricos y ayudaba a los pobres, repartiendo lo obtenido
entre sus amigos, protectores y gente necesitada.
Fue un
héroe para los chacareros y los peones de la pampa seca, los hachadores del
monte, los puesteros de las travesías y los paisanos indios de la meseta;
recorrió el país desde la cordillera patagónica hasta las selvas del Chaco,
donde se juntó con la famosa banda de Mate
Cosido, pasando por la estación Once y el barrio porteño de Barracas; se
mezcló en las rivalidades políticas de la época del yrigoyenismo, en La Pampa y
Mendoza y participó de la agitación agraria de los anarquistas.
En la década de
1930, se lo hacía responsable de cualquier asalto o muerte ocurrida, sus
supuestas acciones se multiplicaban, estaba al mismo tiempo en varios lugares
diferentes, parecía un fantasma que la policía perseguía sin resultados.
A principios de los
años cuarenta se organiza una persecución dispuesta a terminar con él. Lo
sorprendieron y le dieron muerte en la
madrugada del 14 de septiembre de 1941, en General Alvear, Mendoza. Lo
velaron en el Comité Demócrata de dicha localidad. A su funeral asistieron
miles de personas llegadas desde La Pampa.
“El último de los bandidos románticos”,
como lo llama cariñosamente la gente, ha muerto y con su fin nace, en el
corazón de los humildes, un mito. Un protector que los cuida y los guía, tanto
como lo cuidaron a él en la tierra. Juan ha muerto, recordemos su último
mensaje, repetido en varias ocasiones ante sus amigos:
"
... Los que me lloran por muerto que dejen ya de llorar; viviré en el alma del
pueblo, nadie me podrá matar"
TELMA CEBALLOS ESPOSA DE BAIROLETTO: FALLECIÓ A LOS 101 AÑOS EL 23.5.2014 |
Sus restos descansan en el cementerio de Gral.
Alvear Mendoza, en un pequeño mausoleo levantado con las contribuciones de sus
fieles. Concurren a homenajearlo hombres y mujeres que ofrendan flores,
crucifijos, placas y objetos diversos para pedirle que proteja sus familias,
trabajo, salud, amor, etc. Algunos devotos recorren de rodillas la distancia
entre la entrada del cementerio y su tumba. Aún hoy, algunos pampeanos se
ufanan de que sus abuelos hubieran "protegido" a Bairoletto y
recuerdan anécdotas vinculadas a este gaucho que fue el último "gaucho
alzado" que marca el fin de una época.
Con su muerte nace
el mito y la veneración, el mismo que nació con la muerte de decenas de
“gauchos alzados”, como Mate Cosido o Antonio Mamerto Gil
Núñez,
“El Gauchito Gil”, del que se levantan
centenares de altares a la vera de todos los caminos del país.
Telma Ceballos, su
compañera durante 20 años de la vida nómade de los perseguidos por la justicia, falleció el 23 de mayo de 2014 a los 101 años.
Proyección artística
La proyección artística de su figura abarca
una novela (Bairoletto, de J. C. Marcelo Calvo) y una obra de teatro (Lo
llaman Bairoletto, de Telma Ceballos). En
las artes plásticas está representado por un dibujo de Aquiles Badillo. En cine se realizó en 1985, la película dirigida por
Atilio Polverini “Bairoletto, la aventura
de un rebelde”, protagonizada por Arturo Bonin y gran elenco, y finalmente
está presente en las letras de milongas, camperas y décimas de la música
popular pampeana.
Amparaba al que debía,
al pobre, al necesitao,
al que era castigao,
y a aquel que nada tenía.
"San Bautista
Bairoletto"
Amparaba al que debía,
al pobre, al necesitao,
al que era castigao,
y a aquel que nada tenía.
Lo acusaron de bandido
milicos y poderosos,
y políticos golosos
que intereses protegían.
milicos y poderosos,
y políticos golosos
que intereses protegían.
Mas ya ha de llegar el día
que se sepa la verdad
y así la comunidad
grite al cielo con respeto:
que se sepa la verdad
y así la comunidad
grite al cielo con respeto:
¡San Bautista Bairoletto,
la pampa te ha de vengar!
la pampa te ha de vengar!
Autores: Arbelo y Gobi.
Miguel
Eugenio Germino
Fuentes:
-Chumbita, Hugo, “Bairoletto, el último
bandido romántico”, en Todo es Historia nº 20, diciembre de 1968.
-Coluccio,
Félix, Cultos y Canonizaciones Populares de Argentina, Ediciones
Colihue, Arg. 1986.
-Diccionario de Mitos y Leyendas - Equipo
NAyA http://www.cuco.com.ar/
-Hobsbawm
Eric, Rebeldes Primitivos, Ariel, Barcelona,
1974.
-http://www.elortiba.org/pdf/Bairoletto.pdf
-http://www.taringa.net/posts/info/1667129/Bandidos-Rurales-Leon-Gieco-Las-Historias.html
MÁS ALLÁ DE LA FRONTERA... VAIROLETO. Historia y leyenda de un bandolero
ResponderEliminarNéstor A. Rubiano
Colección Tierra Nuestra- Ediciones Corregidor
Es indudable que mucho se ha escrito sobre la vida de Juan B. Vairoleto, una verdadera leyenda del universo rural argentino. Amén de ello, la figura de este hombre cruzó fronteras, fue cuento de fogón en los altos del camino de los troperos y se acercó a las brasas ardientes del imaginario popular para que la gente lo convirtiera, más que en leyenda, en el ideario social de una época signada por los desencuentros argentinos. Néstor A. Rubiano, escritor e investigador pampeano, ha vuelto a reincidir sobre Vairoleto. Hoy completa su labor anterior con una obra de prosa sencilla y directa, mostrando el perfil de un Vairoleto casi desconocido para sus biógrafos y dejando que la narrativa vaya entrelazando pasiones, traiciones, encuentros y desencuentros, al tiempo que desmitifica errores históricos y ordena las efemérides vairoleteanas con suma prolijidad. Rubiano dibuja en sus relatos la ancha geografía donde le tocó actuar al bandido Vairoleto, y describe los personajes y los sucesos hasta los mínimos detalles. El libro tiene pasajes con las confesiones de Telma Ceballos, la mujer de Vairoleto, que explica la personalidad de su marido, sus tics, el amor por sus hijas y a la libertad, el odio a la traición, a la hipocresía y a los burdos personajes de una sociedad y de una época con policías ineficientes, políticos inescrupulosos y patrones explotadores. Rubiano, en definitiva, cuenta una historia con múltiples vivencias y nos deja otro libro para el análisis, el estudio, pero por sobre todas las cosas, un invaluable hallazgo histórico literario que nos permite ilustrarnos mejor y poder discutir con pruebas en la mano quién fue y cómo era el bandido Vairoleto.
--
Libro declarado de Interés legislativo en 2010
--
Libro declarado de Interes Municipal en 20 municipios de pueblos y ciudades de cuatro provincias Argentinas.
--
Actualmente, la obra se comercializa en otros idiomas en formato PDF
Vida, historia y leyenda de Juan Bautista Vairoleto, también conocido como Bairoleto.
ResponderEliminarDescripción: El libro "Más allá de la frontera... Vairoleto", es una muestra cabal de una concienzuda tarea investigativa, en la que un relato pormenorizado con una detallada descripción de sitios, personajes, situaciones, logra transportar al lector al escenario donde sucedieron los hechos. Pero además del especial hilo literario, con este trabajo el lector puede ilustrarse de un modo estupendo en cuanto a la vida y andanzas del bandido que es toda una leyenda de nuestra zona rural. Hasta el momento, esta obra editada por Editorial Corregidor, va por la 9° reimpresión, y fue declarada de Interés Municipal, por más de veinte municipalidades de cuatro provincias. Decretada de INTERÉS LEGISLATIVO, por la Honorable Cámara de Diputados de la Provincia de La Pampa en 2010 y actualmente es material de consulta (no-curricular) en Universidades de habla hispana de varios países, en materias de Ciencias sociales, Políticas y Antropológicas. Fuente DIARIO LA OPINIÓN
(Pídelo en tu librería)