EL COLEGIO INMACULADA CONCEPCIÓN

 Una capilla centenaria, referente barrial y símbolo de solidaridad 

 

En noviembre del año pasado la Capilla del Colegio Inmaculada Concepción, ubicada en el barrio de Almagro, fue declarada Sitio de Interés Cultural de la Ciudad de Buenos Aires por la Legislatura porteña. El proyecto había sido presentado por el entonces diputado Cristian Ritondo y había obtenido el despacho de la Comisión de Cultura. Además, se dispuso la colocación de una placa de mármol “por su aporte a la educación de los hijos de inmigrantes italianos”.Tanto el instituto educativo como la capilla son obra de la Congregación Hijas de la Inmaculada Concepción, fundada por la Madre Eufrasia Iaconis– una inmigrante italiana- en 1904. La construcción de ambos lugares alberga una larga y rica historia.

En 1901, la señorita Elvira Ezcurra donó a la Curia de Buenos Aires un terreno situado entre las calles Humahuaca y Sadi Carnot  (hoy Mario Bravo) a fin de emplazar una institución de culto e instrucción que estará a cargo de las «Hermanas de Caridad Hijas de la Inmaculada Concepción»”. Tiempo después abrió sus puertas el citado colegio con internado y aulas gratuitas, destinado a las niñas del barrio, muchas de ellas hijas de los inmigrantes recién llegados que residían en torno al Mercado de Abasto donde trabajaban. Las alumnas también recibían de modo gratuito los útiles y los libros.

La Madre Eufrasia tenía el sueño de edificar una capilla sobre el mismo predio, lo cual afortunadamente se convirtió en realidad: el matrimonio Anchorena-Blaquierdonó la construcción del templo, inaugurado finalmente el 6 de julio de 1904. En ese momento, el hecho representó un verdadero acontecimiento.  Con el tiempo, la Capilla, emplazada en Mario Bravo 589, devino un punto de referencia para los vecinos. La Hna. Mabel Vetti, Secretaria General de la Congregación, comenta al respecto: “Desde sus orígenes, la actividad de la Capilla fue muy intensa. Por la cantidad y variedad de las funciones litúrgicas y cultos devocionales se puede considerar supletoria de la distante sede parroquial, Balvanera. Los vecinos son convocados todos los domingos para la Santa Misa, así como en las grandes celebraciones del año: Semana Santa y Navidad. El 8 de diciembre, solemnidad de la Inmaculada Concepción, sale de la puerta del templo la procesión que va por las calles del barrio, testimonio del amor a María”.

La Capilla es concebida como la Casa Madre de la Congregación. Desde siempre, la Madre Eufrasia y las Hnas. pertenecientes a dicha formación religiosa realizaron actos de caridad en beneficio de Almagro. “El Colegio y su Capilla respondieron a las necesidades del barrio desde el comienzo. Muchos vecinos encontraron ayuda, atención maternal, espiritualidad y educación en la Sierva de Dios y en las Hnas.que la acompañaban. La creatividad pastoral de la Madre Eufrasia le posibilitó captar las urgencias religiosas y socio-culturales del barrio. El templo sigue trasmitiendo un mensaje de fe a los vecinos. Hoy, la obra iniciada por la Madre Eufrasia sigue educando en la solidaridad, luchando contra la indiferencia y el egoísmo que deshumanizan nuestro tiempo”, expresa orgullosa la Hna. Mabel.

En 1995, la Congregación decidió impulsar el proceso de canonización de la Madre Eufrasia. El 2 de agosto de 1996 sus restos se trasladaron desde el Cementerio de la Chacarita a la Capilla–a una tumba que se halla al lado del presbiterio- al cumplirse 80 años de su fallecimiento. Por eso, desde ese momento, los días 2 de cada mes se celebran  Misa para pedir la glorificación de la Madre. Según confirma la Hna. Mabel, son muchos los testimonios de quienes obtuvieron gracias, tanto espirituales como materiales, por su intercesión. En 2012 se dio por finalizado el procedimiento diocesano, cuyo acto de clausura fue presidido por el entonces Arzobispo de Buenos Aires, Cardenal Jorge Bergoglio, actual Papa Francisco. Por lo tanto, la causa avanza y ya se inició la etapa romana.

Este año se conmemorará el centenario de la partida de la Madre Eufrasia. Así la define la Hna. Mabel: “Fue una mujer lúcida y tenaz. Ella poseía una personalidad inteligente y vivaz, con incansable capacidad de trabajo, temperamento alegre y sensibilidad fina y equilibrada. Guardaba   la cruz en su interior, se aferraba a la fe, encontraba fuerzas en los sacramentos, en la oración y en el amor filial a la Virgen Inmaculada; y hacia afuera, mostraba y daba la paz y la alegría de quien sabe que responde a una auténtica vocación y se entrega apostólicamente”.

Además de Argentina, la Congregación se encuentra radicada en Italia, España, Brasil, Chile y México.Intentando ser la presencia de María, su actividad apostólica abarca diversos ámbitos: escuelas, hospitales, hogares de ancianos, guarderías infantiles, pastoral parroquial, pastoral de acogida, misiones. Las Hnas.se distribuyen en 24 comunidades. La Superiora General es la Hna. Nora Antonelli, de nacionalidad argentina. Las Hnas.siguen las huellas de la Madre Eufrasia, compartiendo el carisma con numerosos laicos organizados en Centros de Colaboradores.

Para la Hna. Mabel, la Capilla Inmaculada Concepción constituye “el testimonio vivo de la santidad de la Madre Eufrasia, que encierra un gran valor religioso, histórico y cultural”.

                                                   

                                                                                     Laura Brosio