Hoy es un día aciago en
la historia argentina, entró en vigencia el decreto (más bien decretazo) que
bien ganado tiene el nombre: “MILEI”, por el que, --de no mediar urgente
invalidación—da vuelta La Constitución Nacional, y la división de poderes.
Hay más de 30 presentaciones
en la justicia, la que debería declararlo nulo, pero de no ser así, además el
parlamento tiene la obligación, para salvar los intereses de la población,
derogarlo dentro de los plazos constitucionales.
En el mientras tanto,
miles de instituciones, sindicatos, asociaciones y representantes de la
población también lo repudian y reclaman su anulación.
Publicamos una de la
presentación, de nuestro representante vecinal y señora, de la Junta de Estudios
Históricos de Balvanera:
En el día de hoy
hemos remitido esta carta a cada uno de los diputados.
NO PERMITAN QUE REMATEN LA PATRIA
En ejercicio de la facultad que me otorga el artículo 14 de la
Constitución Nacional, de peticionar a la autoridades, me dirijo a usted, en su
carácter de representante del pueblo de la Nación Argentina, con el objeto de solicitarle
y, si eso no fuera suficiente, de implorarle, que haga honor al mandato
recibido y defienda los intereses de la Patria, que son los intereses de los
ciudadanos, al menos de los ciudadanos bien nacidos, que se diferencian de la
llamada “gente de bien”, que sólo son un puñado de vendepatrias, huérfanos de
todo sentido de comunidad, de solidaridad, de pertenencia a la familia común
que conformamos los argentinos que nos preciamos de tales y que cuidamos lo
nuestro, sin concesiones a la avidez del dinero y del poder extranjero.
Ustedes son mayoría, no caigan en la trampa de la gobernabilidad.
Tienen la oportunidad histórica de poner freno a una dictadura que no sólo nos
priva de nuestra libertad, aunque declame lo contrario; sino que nos despoja de
nuestra soberanía rifando al mejor postor y sin límites nuestras riquezas
naturales, nuestra tierra, nuestra agua, nuestros mares y avasalla los derechos
más elementales que tanto esfuerzo y sangre han costado conseguir.
En vuestras manos está el destino de la Nación y también la decisión de
pasar a la historia con los mayores honores o, como infames traidores a la
Patria.
María Alba Aiello de Almeida
Mario de Almeida
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