lunes, 29 de septiembre de 2025

EDITORIAL AL Nº 364 DE PRIMERA PAGINA DE OCTUBRE 2025




Milei, “el hombre que está solo y espera”, al mejor estilo de Scalabrini Ortiz, que no es aquel que ensaya la construcción de un ser nacional, sino por el contrario, Milei personifica un ser desarraigado, más propio de la disgregación nacional y el cipayismo, hoy caído en desgracia tras los dos sonados casos: $LIBRA y las coimas denunciadas por Spagnuolo; desgracia potenciada tras su derrota electoral en la provincia de Buenos Aires, ya que terminó perdiendo la confianza de sus patrocinadores (el Círculo rojo y compañía), quienes hoy buscan –abiertamente– a su reemplazante.

El gobierno de Javier Milei está políticamente terminado, es la apreciación de gran parte del mundillo mediático, político y empresarial, y hasta de fragmentos de sus pares de LLA, que no logran reunir gente en sus últimos actos, convertidos en esmirriados.

El extravagante experimento libertario “tiene el boleto picado”, es la opinión generalizada, perdió crédito social, perdió aliados, perdió la calle, perdió el Congreso, perdió las redes, perdió a “los mercados”, perdió la mística y hasta perdió a varios de los suyos. Ya está en “plan durar”, en “plan llegar”. ¿Llegar a dónde? A octubre, aunque sea con la lengua afuera y rifando los dólares que no tiene, recurriendo a préstamos desesperados, que después pagaremos todos los argentinos. Rematan dólares para mantener el precio de la divisa en el famoso techo de la banda, sin conseguirlo.

Y… como frutilla del postre, el nuevo endeudamiento, trágico, fatal, impagable, que es ilegal y no debe reconocerse…

Milei, azotado en su infancia por su progenitor, ya no puede, siquiera, ser confortado por su hermana –“La jefa”–, principal implicada en el escándalo de las coimas.

Está solo y espera…, espera el destino que le tienen reservado sus patrocinantes, acostumbrados a usar y descartar. La última oportunidad son los comicios de medio término del 26 de octubre, que están a la vuelta de la esquina y en los que las encuestas no le resultan propicias.

A todo esto, los que no están solos y siempre esperan, continúan ajustados, congelados y embromados por las políticas contrarias a sus intereses opuestos a la de los grandes círculos de poder concentrados, que históricamente pretendieron imponer, tanto con Milei como con Macri y antes con Cavallo o Martínez de Hoz y toda la cría liberal, que se padeció durante muchos años.

Pero, hoy no vale más poner la otra mejilla para ser abofeteada, el grueso de los ajustados, cansados, abatidos, descorazonados, reaccionaron a tiempo y dijeron ¡basta!


Hasta la Próxima






No hay comentarios:

Publicar un comentario