SOLIDARIDAD CON EL SACERDOTE JOSÉ MARÍA DI PAOLA (PADRE PEPE) DE
21 DE BARRACAS AMENAZADO POR EL NARCOTRÁFICO.
Nació como medio alternativo en septiembre de 1993. Refleja la identidad y la historia de los barrios de Balvanera y Almagro, brindándo un instrumento de ayuda a mejorar la calidad de vida. En el año 200l recibió el Primer Premio de la “Orden Civil Heráldica de la Amistad”, entre más de 130 Barriales de Capital y Gran Bs As, además el Premio Mario Bonino UTPBA 2012, Palmiro Vanoli 2012 y 2014, y otros. Se lo encuentra en más de 350 lugares, y es de distribución gratuita.
¿Por qué Hugo Chávez escogió el libro Las venas abiertas de América latina para regalarle al nuevo presidente de Estados Unidos? Porque es uno de los libros esenciales para entender a América latina y a los propios Estados Unidos. “La división internacional del trabajo consiste en que unos países se especializan en ganar y otros en perder. Nuestra comarca del mundo, que hoy llamamos América latina, fue precoz: se especializó en perder desde los remotos tiempos en que los europeos del Renacimiento se abalanzaron a través del mar v le hundieron los dientes en la garganta.”
EL BARRIO Y UNA HISTORIA DE CORRUPCION:
En materia de corrupción no hay tiempos históricos. Hoy es moneda corriente y casi ni nos asombramos, pero también existió ¡y cómo! en épocas pretéritas, y el mismo nombre del barrio se encuentra inmerso en un pasado salpicado por ella desde tiempos de
Juan María de Almagro, nacido en Málaga, llegó a Buenos Aires en 1786 junto a sus hermanos Francisco y Manuel. Venía con un cargo asegurado en el Virreinato: Asesor Jurídico y Auditor de Guerra.
De Francisco poco se supo, pero Manuel fue nombrado en 1793 subdelegado de
Contrajo matrimonio con Ana de Andrés y Pinedo, hija de Juan de Andrés y Arroyo y Ana Pinedo. Juan María incorporó así a la familia dos “nobles” apellidos, asegurándose además un excelente cargo. En suma, un matrimonio que unió linaje y títulos de la alta sociedad colonial.
De la pareja nacerían once hijos, uno de ellos Julián, quien será el que más tarde le da su nombre al barrio, al adquirir la mitad norte de la extensa quinta de Carlos dos Santos Valente, que ocupaba más de 12 manzanas actuales.
El primero de la familia en caer en desgracia fue Manuel al ser separado de su cargo en el Alto Perú por una expresa orden real que declaraba: “El rey se halla enterado de las extorsiones, estafas y malos tratamientos que ha causado a aquellos vasallos desde que tomó posesión del empleo…”
Así fue enjuiciado y condenado por
No obstante, Juan Martín de Pueyrredón lo denunció en 1807 por su complicidad con un conocido corrupto de entonces, Manuel Gallego, al acusar a ambos de cometer significativos abusos de autoridad, mediante los cuales obtuvo un ilícito enriquecimiento.
Otra perlita de aquellos tiempos es que tanto Almagro como Gallego fueron parte de la comitiva en la ignominiosa huida del virrey Sobremonte, durante las invasiones inglesas.
La cadena de corrupción familiar no termina allí. El suegro de Juan María, el “ilustre” Juan de Andrés y Arroyo, contador de las reales cajas, fue denunciado a su vez por el virrey Del Pino de connivencia con la entonces muy extendida banda de funcionarios que lucraba con las prebendas públicas (en criollo, “la mano en la lata”). A pesar de todo, don Juan María y su suegro sortearon con éxito tales escollos, siguieron en la función pública y hasta participaron como honorables vecinos de la corona en el Cabildo Abierto del 22 de mayo de 1810.
El voto de Juan María de Almagro en ese cabildo fue “esperar mayores informaciones sobre la situación en España”. En cambio, el de su suegro fue “formar una junta presidida por Cisneros”. Cambiar algo para que nada cambie.
¡Qué lejos en la historia, pero cómo aparece el Barrio de Almagro vinculado a aquel acontecimiento que culmina el 25 de mayo de 1810!
Carlos Ibarguren (h), en varios números de su revista Genealogía, hace una completa biografía de Juan María de Almagro y Juan de Andrés y Arroyo.
Con el nuevo Gobierno Patrio, nuestro Juan María de Almagro, después de tantas glorias y bonanzas, caería definitivamente en desgracia. Fue dejado cesante de sus funciones públicas, como era lógico, y considerado “enemigo de
-La casa en que residía.
-Un campo en Tres Cruces.
-Acciones en el Teatro Argentino.
-Una estancia en Vera Cruz.
-Estancia: El Rincón de los Mata Ojos, de más de 20.000 leguas en
Oriental
-Otras dos estancias también en
-Una estancia en la frontera con Brasil.
-Varios campos en Entre Ríos, con 22.000 cabezas de ganado.
-Tierras en Arroyo Negro (Corrientes).
-Una extensa propiedad también en Corrientes, denominada “Rincón de
Guayquiraró”.
Sin embargo, por las propias contradicciones de
Una vez más volverá a sortear a la justicia y nadie investigará la laxitud de sus bienes. Además de rico, llegará a ser un aventajado hombre de negocios del joven país, y con la ayuda de su hijo Julián, explotará sus numerosas propiedades, obteniendo jugosas rentas.
Juan María sobrevivió a su esposa, muerta en 1836. Años más tarde dictará su testamento, tan sólo seis días antes de morir, en el que recomienda a sus hijos: “Repartirse mis bienes del modo y forma que les pareciere pueda resultarles más provechoso, utilidad y ventaja, teniendo en cuenta ante todo la armonía y unión que hasta ahora han cultivado como buenos hermanos, habiendo cumplido a la vez para conmigo, con todo aquel respeto, sumisión y cariño propio de unos buenos hijos (…) ser buenos padres de familia y honrados ciudadanos, cuidando siempre encomendar a Dios a este padre que tanto se ha afanado por la mejor educación y bienestar de sus hijos.”
Un corrupto pretende regenerarse al momento de testar y dar lecciones de moral a sus hijos. Pero a poco de fallecido, a los 88 años el 24 de julio de 1843, éstos, lejos comportarse como “buenos hermanos”, comenzaban con los pequeños y los grandes escándalos por “la repartija”.
El grueso de la herencia será administrada por Julián, nombrado albacea (encargado de hacer cumplir el testamento) según la voluntad paterna, “por ser el hijo que se halla más instruido del estado de mis asuntos y negocios, por haberlos manejado durante largo tiempo bajo mi dirección y por el práctico conocimiento y confianza que tengo en su probidad”.
Las disputas y rencillas entre los herederos pronto llegaron a la justicia. Julián ni siquiera dio cumplimiento al reparto del 10% de lo testado para “los pobres de Jesucristo, llamados vergonzantes”.
Toribio Almagro, sobrino de Julián, le inició una ejecución hipotecaria ya que a pesar del deseo del abuelo, su tío realizaba una serie de malos negocios, de manera que rápidamente la gran fortuna de “los Almagro” empezó a evaporarse entre pleitos, demandas, ejecuciones y remates.
En 1880 la casa de Julián (el albacea) se encontraba en Rivadavia 3719, haciendo esquina con Bulnes, y diez años más tarde la entrada era por Bulnes 60, su último domicilio conocido.
Formó pareja con Junta Pastora Díaz de
Al término de la historia, no quedaron bienes de “los Almagro”, especialmente de Julián; hasta los gastos de asistencia de su última enfermedad y del sepelio fueron costeados por su yerno, Francisco Lezana.
¿Qué sucedió con la enorme fortuna de la familia? ¿Julián la habrá repartido o dilapidado en vida? ¿Fue presa de sus “malos negocios famosos”?
Todo queda en un halo de misterio; no es fácil que se evaporen gigantescos bienes. Sin embargo y paradójicamente, el apellido Almagro quedó para la posteridad, nada menos que como el nombre de un querido barrio de Buenos Aires. Claro está que la inmensa mayoría de los vecinos ignora estos “pormenores” (no tan “por menores”) de la familia.
Miguel Eugenio Germino
FUENTES:
-Cunietti-Ferrando, Arnaldo J., “Don Julián de Almagro y los orígenes del
Barrio”,Historias de
-Cutolo, Vicente O., Buenos Aires, historia de las calles y sus nombres, Elche, 1994.
-http//Wikipedia.org/Wiki/almagro-(Buenos Aires)
-Ibarguren, Carlos (h), “Los hombres de Mayo y otros Artículos”, Revista Genealogía, nº 13, Buenos Aires, 1961.
-Razzómico, Carlos A., Antiguas Quintas Porteñas, Interjuntas, 1994.
“VA A ESTAR LINDA BUENOS AIRES…”
“El poder tiende a corromper y el poder absoluto corrompe absolutamente.”
Lord Acton, 1887.
Millones y millones de pesos del presupuesto de
La motivación macrista estaría visible, hacer mucho ruido en consonancia con las elecciones que se vienen para el 28 de junio. Sin embargo, no convocó a la votación de comuneros, ni habla de los democráticos Consejos Consultivos Barriales, ¡gran olvido del gobierno local!
Es escasa la apetencia de los gobernantes de compartir el poder. Pero ¡ojo Macri! no se olvide que “el poder corrompe…”, y esta frase convertida en dicho popular, viene perfectamente al caso.
¿En qué se invierten los dinerillos de nuestros impuestos? ¿Acaso en educación y salud?
Para nada. La educación y la salud son poco perceptibles a la hora de recoger votos, aunque se olvida el gobierno local que sí se van a percibir en las urnas las carencias de los maestros, médicos, alumnos, padres y pacientes.
“Va a estar linda Buenos Aires”, pero para unos pocos privilegiados. Se busca una ciudad-vidriera para el turista extranjero que venga a dejar sus dólares. Poco importa el vecino común que la viene padeciendo desde hace tiempo.
¿Para qué hacer subtes, si están bajo tierra y no se ven? Vale mejor atiborrar las calles de coches nuevos y caros, que hacen infernal el movimiento en el macro y en el micro centro.
El subte es más rápido, más seguro, más económico y no contamina, ¿por qué entonces invertir cero peso en ello? ¿Se piensa en una ciudad para el futuro, o en una ciudad tan sólo para sortear el 28 de junio?
Tampoco son claras las cuentas de los costos de aquellas veredas, ni las licitaciones, ni se entiende por qué, a los pocos días de terminada una vereda viene una empresa de servicios y la rompe. ¿No se planifica nada en nuestra bendita ciudad?
Falta una política clara en cuanto al espacio público. Nada se dice en el Gobierno de
La cuestión es esencialmente política y parece ser que no existe voluntad para llevar a cabo las obras que el barrio reclama. ¿Así es como piensa recolectar votos Macri en Balvanera y Almagro?
Consejo de Redacción
FUENTES:
-Cámara, Helder, Iglesia y Desarrollo (reportaje), Búsqueda, 1968.
-Castelnuovo, Elías, Jesucristo y el reino de los pobres, Editorial Rescate, 1976.
-Documentos de Medellín, Ediciones Paulinas, 1971.
-http//es.wikipedia.org/Wiki/Ascenci%C3%B3n_de Jes%...
-http//www.geocities.com/mphaperu/jesus.htm/?200827
-Jubosky Carlos, Jesús, una biografía de Armand Puig, Diario Clarín, 5.abril.2008.
-
-Trocmé, Etienne, Jesús, Los Hombres, CEAL, 1969.
UN MUNDO GRIS Y SIN PERSPECTIVAS
El año siguiente (L’anné suivante)
Origen: Francia
Dirección: Isabelle Czajka
Intérpretes: Arianne Ascaride, Anais Demoustier, Bernard
Es éste un film rico y complejo que admite varias lecturas, he aquí algunas de ellas. Hay un padre enfermo, seguramente de gravedad. Manu, su hija adolescente (Anais Demounier), lo cuida mientras su madre parece ser indiferente ante la situación.
La relación entre ambas es conflictiva; el padre morirá y la hija procurará hacer su duelo, penosamente.
Escuchará una grabación con la voz del padre, hojeará sus libros de hace algunas décadas sobre cine, sobre política, y sólo tendrá una amiga para compartir su pesar. Además, estarán las clases de teatro a las que asiste.
Hay cierto paralelo significativo que no debe omitirse, entre la obra teatral que a ella le toca ensayar, nada menos que El jardín de los cerezos, cuyo texto trata de una familia que perderá algo significativo: un bellísimo jardín, representativo del modo de vida de la alta burguesía rusa que se estaba desmoronando inexorablemente.
La madre de Manu (Arianne Ascaride) sostiene que hay que seguir, vender de inmediato la casa, sin el paso por el duelo imprescindible de la familia. Las cosas salen mal.
Lo que cuenta la voz “en off” de Manu, de un modo impersonal, como si no fuera asunto de la joven, es todo este proceso que ha transcurrido ya hace un año.
Muchos han visto en esta película lo que hemos narrado hasta aquí, o sea un drama individual. Pero lo que enfoca la interesante realizadora Isabelle Czajka son las peripecias de una joven que, además de haberse quedado sin padre y sin tener una madre que la comprenda, no tiene tampoco una sociedad contenedora. Queda fuera del colegio, con un empleo precario, donde cuenta apenas con minutos para su almuerzo en el pasillo de un centro de compras, sin otro horizonte visible.
Las consignas del Partido Comunista Francés, en las que creía su padre cuando Manu era pequeña, han quedado en el olvido y hoy suenan ridículas, extemporáneas, en un presente absolutamente mercantilista, donde sólo se avizoran las moles de los hipermercados, las veloces autopistas y las playas de estacionamiento. Espacios anónimos -no lugares- y carteles publicitarios.
La novel realizadora dice que ella no buscó ese entorno. Ese paisaje es inevitable, es el entorno suburbano.
Una metáfora del mundo actual, vacío y gris para la juventud de estos días.
MARTHA SILVA