EDITORIAL PRIMERA PÁGINA - NOVIEMBRE 2021

 




EDITORIAL AL Nº 317 NOVIEMBRE 2021

 

Describe la leyenda mitológica que tras haber robado el titán Prometeo el fuego de los dioses para regalarlo a los hombres y el castigo que Zeus le impuso por tamaña osadía, su hermano Epimeteo recibió como regalo de los Olímpicos una compañera: Pandora. Ésta fue dotada con todos los encantos que los dioses podían proporcionarle: Afrodita le dio la belleza, Hermes la elocuencia, Atenea la sabiduría, Apolo la música...

 Cuando Pandora se presentó ante Epimeteo, lo hizo acompañada de otro regalo de Zeus: una caja cerrada, que bajo ningún concepto debía ser abierta. Epimeteo, deslumbrado ante su gracia y belleza, ignoró la promesa hecha a su hermano de no aceptar jamás regalo alguno de los dioses olímpicos, pues eran astutos y traicioneros, y la aceptó como compañera, aceptando al mismo tiempo la caja que la acompañaba, que escondió bajo llave en lugar seguro...

 Pero la curiosidad pudo con Pandora, y un día que Epimeteo dormía le robó la llave y la abrió para espiar su contenido. Al levantar la tapa, grande fue su desilusión al encontrarla vacía, pero era porque en ese mismo momento escaparon de ella todas las desgracias y males que podían afectar al hombre y se extendieron por el mundo: enfermedades, sufrimiento, guerras, hambre, envidia, ira... Más todavía, le dio tiempo a vislumbrar en el fondo de la caja algo que aún no había escapado, y corriendo la cerró. Lo que pudo conservar en el fondo de la caja fue la Esperanza, que no consiguió escapar.

Los tiempos transcurrieron… la caja se transformó en un gran cofre en el que se multiplicaron los males, la leyenda de Pandora se transformó en realidad; y se añadieron nuevas calamidades, que fueron creando los descendientes de aquellos hombres y que se expandieron por el mundo. A todo esto, la humilde esperanza se mantuvo oculta. Mientras unos la disfrutaban, otros la carecían, nació así un nuevo concepto de la realidad: la injusticia.

Superada la esclavitud, sobrevino la del feudalismo, y finalmente la del capitalismo, que con el nombre de “liberalismo perdura en nuestros días. El laissez faire, expresión francesa de “dejar hacer” de la mano de Adam Smith, con una completa libertad en la economía: libre mercado, bajos o nulos impuestos, bajos salarios y mínima intervención de los gobiernos. Se trata de una mano invisible “egoísmos responsables” que lo guía todo.

Más tarde, el liberalismo se transforma en neoliberalismo, “una variante política y económica que tiende a reducir al mínimo la intervención del Estado”​ más de lo mismo, cuyos “pilares básicos incluyen privatizaciones y desregulación” (desandar los pocos o nulos controles).

Pero sobrevendrán nuevos males en aquella “mitológica caja”, entrarán en escena los denominados “paraísos fiscales”, sitios a los que no llegan siquiera las leyes de los países más o menos organizados.

Así nos familiarizamos con términos como: “fuga de capitales” y “blanqueo de los fugados”y en los últimos tiempos la filtración de documentos en los “Panamá Papers y “Pandora Papers.

En ellos se incorporan nuevos evasores, entre los que se encuentran presidentes, como Sebastián Piñera en Chile, Guillermo Lazo en Ecuador, y en Argentina, un hermano y la madre de Mauricio Macri, entre muchísimos más, con sus lobbies de presión mediática.

 A éstos, aparte de evadir y blanquear, no les gusta que los controlen, que los regulen, de allí la oposición a leyes como las de: “etiquetados”, “góndolas”, “precios cuidados”, son aquellos los que financian las campañas políticas de las derechas: Pro- Cambiemos y compañía, manipulando a legisladores con ilegales dádivas.

 Mientras, los precios descontrolados encontraron la horma de su zapato: ¡¡¡albricias, llegó el congelamiento!!! y los males de Pandora: a los gritos. El mismísimo Papa Francisco pidió por un salario mínimo universal, la reducción del horario de labor, reclamó a los poderosos del planeta que trabajen por un mundo más justo, solidario y fraterno, la cancelación de la deuda de los países pobres, la prohibición de las armas, el fin de las agresiones y las sanciones y la liberalización de las patentes para que todo el mundo tenga acceso a las vacunas, para que cada persona en este mundo pueda acceder a los más elementales bienes de la vida.

¿Y la esperanza?, escondidita en el fondo de aquella cajita espera una oportunidad, ¿la tendrá?

Y: colorín colorado, la leyenda continúa…

 

Hasta la próxima


 

RESPALDAR FIRMEMENTE EL CONGELAMIENTO DE PRECIOS, Y SI ES NECESARIO, APLICAR LA LEY 20.680 DE ABASTECIMIENTO, QUE ESTABLECE SEVERAS SANCIONES A LOS INFRACTORES



UN BARRICIDIO INTOLERABLE

 

LA PLACA A LAS ABUELAS DESTRUIDA FRENTE A UN OBRADOR QUE NO  DEBIERA ESTAR EN ESE LUGAR


Las palabras terminadas en “cidio” no presagian nada bueno: homicidio, genocidio, femicidio, etc., y si lo referimos a los barrios de Buenos Aires, barricidio significa suicidio barrial, ecológico y pérdida de la calidad de vida.

El tema viene a cuento por la transformación en curso y futura de la altura de los edificios que se viene proyectando. Primero fueron los barrios ribereños, sobre los 11,6 km de costa frente al río, lugares elegidos por aquellos que desean disfrutar del paisaje costero, a un pasito y lejos del “mundanal ruido” a que refiere el poeta, hoy en vías de “privatización”, aunque la Justicia está poniendo en caja la de Costa Salguero, falta ahora frenar la de Costanera Sur para nuevas privaciones al ciudadano gasolero.

No más el clásico recorrido por el frente costero, por la “anti pudorosa” Fuente de las Nereidas, de la también “anti pudorosa” Lola Mora, de la Reserva Ecológica sumida en la sombra a media tarde por los altos edificios de Puerto Madero y mañana serán también los de la Ciudad Deportiva.

Al fracasado proyecto del emprendimiento norte, declarado inconstitucional judicialmente, se agrega el proyecto sur (Ciudad Deportiva), mediante la modificación de los Códigos de Edificación y Planeamiento aprobados por mayoría automática de la Legislatura, creando “el boom urbanístico del futuro”: más edificios de altura en detrimento de los espacios verdes, tan carentes en la ciudad.

Barrios, tranquilos, de casas bajas y plácido sol como Villa Urquiza y Villa Ortúzar se resisten al avance de las construcciones en altura y advierten que hay unas 81 propiedades en venta y 56 en obra, es decir que también son víctimas de aquel barricidio que amenaza a la ciudad toda, y que encabeza una topadora inmobiliaria con la marca registrada del jefe porteño, y pretendido candidato a presidente. ¡No se puede creer!

Balvanera, Almagro y las Comunas 3 y 5 en toda su extensión, se encuentran amenazados por un futuro con menor calidad de vida. La venta de edificios públicos está a la orden del día. La Dirección de Estadísticas de la Ciudad, de Perón 3269/71 un amplio edificio que los vecinos piden para un emprendimiento barrial, con posibilidades de un gran natatorio local, y la Casona de Pringles 344 para un jardín materno infantil, son dos de entre muchos otros predios amenazados por la piqueta.

Nunca se consultó a los vecinos sobre estos temas, contrariando la Ley nº 1.777 de Comunas, y la Ley del Parque de la Estación Nº 5.734, que además crea una “Mesa de Trabajo y Consenso” hoy ninguneada y sometida al ostracismo, con un Parque abandonado y “venido a menos” luego de una lucha de 21 años. Nunca se terminó la parte sur sobre Bartolomé Mitre y el puente peatonal que une a ambas fracciones del Parque, y para colmo Ferrocarriles se apropió de un pedazo en la curva de Díaz Vélez, para una obra propia que bien podría haberse realizado en cualquier otra parte; con esta obra destruyeron el mural en homenaje a las Abuelas, allí emplazado.

Hoy sinceramente, toda la ciudad está en peligro, en cualquier predio pueden, de la noche a la mañana, comenzar una mega obra, altísimas torres, que restarían aire y sol a la ciudad y sepultarían en las sombras a las casas linderas. La situación no es moco de pavo, es la resistencia de los vecinos en Villa Ortúzar, en Villa Urquiza, en Almagro, en Balvanera y en la Costanera sur y norte y otros barrios.

La cuestión es mega obras o calidad de vida para todos los vecinos, no sólo para unos pocos privilegiados. La cuestión es oponerse a los mega negociados inmobiliarios que benefician a empresarios inescrupulosos que sólo ven el lucro particular.

A los barricidios hay que oponerles resistencia y movilizaciones, a la mayoría automática de la Legislatura lograda a base de billeteraoponerle la lucha de todo un pueblo unido por una mejor calidad de vida, para nuestros hijos y nietos, más espacios verdes, menos cemento, menos calles asfaltadas y menos negocios con cara de “negociados”.

 ¿Querrán los vecinos priorizar estos negociados?

 

Consejo de Redacción

 

DEL LAZARETO SAN ROQUE AL HOSPITAL RAMOS MEJÍA

                           EL HOSPITAL SAN ROQUE - HOY RAMOS MEJÍA


Del Lazareto “San Roque” al Hospital Ramos Mejía

 

El 2 de febrero de 1536, Pedro de Mendoza fundaba la efímera “Ciudad del Espíritu Santo y Puerto de Santa María del Buen Aire”. Si bien al comienzo las relaciones entre los españoles y los querandíes (originarios que habitaban la zona) fueron pacíficas y amistosas, rápidamente viraron hacia los encuentros armados, el sitio, la hambruna y finalmente su destrucción en 1541. Posteriormente el 11 de junio de 1580, Juan de Garay produce la segunda y definitiva fundación con el nombre de “Ciudad de la Santísima Trinidad y Puerto de Santa María del Buen Ayre”.


                                                     EL HOSPITAL RAMOS MEJÍA EN 1906

El nombre de Buenos Aires se debe a la devoción a la Virgen del Buen Aire sentida por los marineros y tripulantes que acompañaban a Pedro de Mendoza. Recordemos que esta era la época de la navegación a vela, que la posibilidad de que una embarcación alcanzase otras costas dependía del régimen de vientos y la Virgen del Buen Aire era la devoción marinera que cosechó aquella con los buenos vientos.

Los primeros médicos que arribaron con Garay, comprobaron que la medicina practicada por los nativos era eficiente. Sin embargo, el estado sanitario en la colonia dejó mucho que desear; los pocos médicos que había eran de origen extranjero y sólo atendían a los sectores más privilegiados de la sociedad de entonces.

Por tal razón la salud popular era practicada por curanderos, veterinarios que oficiaban de médicos y hasta por barberos que incursionaban en las primeras cirugías.

El hombre, a lo largo de su historia fue campo fértil para las epidemias, las grandes pestes; la ciencia llegó siempre con atraso para combatirlas, y siempre dejaron una secuela de infectados y de muertos.

Nuestra América, especialmente después de la conquista, fue asolada por plagas y pestes, muchas de ellas traídas desde Europa por los conquistadores. En una población sin defensas desarrolladas para las nuevas enfermedades, los resultados fueron desastrosos: causaron más muertes que las muchas que produjeron las campañas militares.


                                         UNA DE SUS ANTIGUAS SALAS EN EL AÑO 1921

Las más mortales fueron las epidemias de cólera, en 1856, 1886 y 1894, y las de fiebre amarilla, en 1852, 1858, 1880 y 1871 (la más mortífera), esta última produjo más de 14 mil muertes, lo que hizo rebasar al antiguo Cementerio del Sur (hoy Parque Ameghino en Caseros al 2300). Allí se levanta un monumento a los caídos por la fiebre amarilla de ese año.

Ya en la actualidad, en los años 2019/21, aparece el “Coronavirus”, peste de carácter mundial, tal vez la más mortífera de la historia, que apunta a convivir con ella no se sabe hasta cuándo.

A raíz de las experiencias que tuvo que atravesar Buenos Aires con dichas enfermedades, hacia 1868, durante la gestión del Dr. Juan A. Aldao como presidente de la Comisión Municipal, se buscó un sector alejado del casco urbano, alto, seco y de buena vegetación, que sirviera para aislar y tratar a los pacientes. Y lo habilitaron en una antigua quinta del barrio de Balvanera, aproximadamente dos manzanas, entre las actuales calles Urquiza, México, 24 de Noviembre y Venezuela: el Lazareto “San Roque”, era el primer aislamiento de contagiados en Buenos Aires.

En el año 1869 quedaron conformadas entonces dos grandes salas-barracas de madera, de 20 metros de largo por seis metros de ancho y cinco de alto, con más 10 habitaciones de barro que se utilizaban para la administración, consultorios externos, botica y recinto de peones y enfermeros. Las construcciones, además de precarias resultaron insuficientes, por lo que se resolvió ampliarlas, aunque cuando promediaban las obras éstas quedaron paralizadas por unos seis años, por falta de presupuesto.


                      LA ANTIGUA CAPILLA DEL HOSPITAL (HOY DEMOLIDA Y REEMPLAZADA

Se reanudaron en 1881, con la intendencia de Torcuato de Alvear. La dirección estuvo a cargo del arquitecto Juan Bautista Buschiazzo, quien adoptó el estilo arquitectónico que dominaba en aquella época para los edificios destinados a la salud. Un estilo sencillo, pero no desprovisto de elegancia.

Sobre un terreno de 16.900 metros cuadrados, en casi dos manzanas, el antiguo Lazareto pasó a ser el “Hospital San Roque”, inaugurado oficialmente el 12 de agosto de 1883.

El frente principal del edificio presentaba un cuerpo medio sobresalido, como logia arquitectónica, a modo de galería o pórtico sostenido por columnas y arcos. En planta baja funcionaban la dirección, administración, mesa de entradas y sala de guardia. El piso superior lo ocupaban los dormitorios de médicos y practicantes; contaba con ocho pabellones con capacidad para 240 camas, en aquel entonces exclusivo para hombres.

El acceso se realizaba por un zaguán de entrada que desembocaba en un gran jardín rectangular encuadrado por galerías de altas y elegantes columnas que unían los distintos pabellones. A un costado se integraba como parte del conjunto la Capilla que conservaba el mismo estilo del hospital.

Era director de la entonces Asistencia Pública el Dr. José María Ramos Mejía (1850-1914), historiador, sociólogo y psiquiatra argentino. En 1886 incorporan al hospital el servicio de medicina infantil dirigido por el Dr. Facundo Larguía, y se instaló también un horno de esterilización.

Las instalaciones de este centro de salud sufrieron múltiples ampliaciones y reformas. La primera fue en 1888, con la construcción de cuatro nuevos pabellones, más otros dos que quedaron habilitados en 1892 y con lo que ascendió a 600 el total de camas. En su nueva edificación se aprovechó una gran cantidad de elementos de la demolición provenientes de la apertura de la Avenida de Mayo, inaugurada en el año 1894.

En el año 1904 se ubicó en el establecimiento la Cátedra de Clínica Obstétrica y Ginecológica Eliseo Cantón, dependiente de la Facultad de Medicina, con lo que los servicios se ampliaron también a las mujeres.

 

 

JARDINES INTERIORES Y LA NUEVA CAPILLA DEL AÑO 2009


                                      PANORÁMICA DE LOS JARDINES 
 

Tras la muerte del Dr. Ramos Mejía, en 1914, el establecimiento sanitario fue rebautizado con aquel prestigioso nombre, y un busto realizado en 1935 por el escultor José Fioravanti lo recuerda justo en la entrada.

Con tantas reformas que sufrió en su centenaria vida, la fisonomía distintiva del proyecto inicial quedó sepultada por toneladas de cemento, comenzando por su hermosa fachada original de la calle Urquiza 609, que quedó absolutamente desvirtuada, reemplazada por una absurda mezcla de estilos.

Otro tanto ocurrió con las galerías, que fueron cerradas con hierro y vidrio, para hacerlas más funcionales, aunque eso significó desestimar su estilo arquitectónico; no caben dudas de que faltó realizar un estudio previo y un proyecto que podría haber preservado sus rasgos originales. Asimismo, la Capilla fue demolida hacia la década de 1920 y se construyó otra en el centro del parque, que para nada respetó la elegancia sencilla del edificio inicial.

Por este acreditado establecimiento de salud desfilaron los más destacados especialistas, entre ellos los doctores Pedro Chutro y los premios Nobel, Bernardo Houssay y Luis Federico Leloir, como así también el Dr. Juan B. Justo, fundador del Partido Socialista.

Actualmente el Hospital Ramos Mejía es el único que cubre la salud pública en la amplia zona de los barrios de Balvanera, San Cristóbal, Almagro y Boedo. Sin embargo, se integra al conjunto de establecimientos públicos de salud con grandes deficiencias edilicias por falta de adecuado mantenimiento, escasez de insumos hospitalarios, así como de personal médico y de enfermería, ambos deficientemente remunerados.

Las distintas políticas de descentralización hacia niveles inferiores de gobierno, tanto en el orden hospitalario como de educación llevadas adelante en la década de los noventa, vinieron a resquebrajar aún más el alicaído sistema público. En el caso de la salud, con la pretensión de suplirlo por las Obras Sociales sindicales y un régimen privado caro y escasamente accesible.

El progreso, como se llamó a sí mismo, actuó disfrazado de tal arrasando todo a su paso, sin pensar que la mal entendida funcionalidad moderna pueda convivir con la belleza edilicia arquitectónica de un pasado que sólo es superado en apariencia, pero no en realidad, ya sea por la calidad de los materiales utilizados como por lo poco elegante de sus líneas. Si bien es cierto que no todo lo pasado fue mejor, tampoco lo es “el modernismo” de un evidente mal gusto.

 

Miguel Eugenio Germino

 

Fuentes:

-Aslan, Liliana y otros, Bs. As. Balvanera 1817-1970, Facultad de Arquitectura de Bs. As.

-La Administración Sanitaria de la Ciudad de Bs. As., tomo II, MCBA, 1908.

-Periódico Primera Página, nº 24 de octubre de 1995.

-Piñero, Alberto G. y Trueba, Carlos M., Balvanera y El Once, Fundación Boston, 1996.

-http://arquitecto-buschiazzo.blogspot.com.ar/2009/10/caba-gralurquiza-609-ex-hospital-san.html

-http://www.taringa.net/posts/info/12010475/Resena-Historica-de-los-Hospitales-Portenos.html

-https://www.historiahoy.com.ar/la-primera-fundacion-buenos-aires-n1567




  

COMBINANDO ÉPOCAS EN BALVANERA Y ALMAGRO



 Combinando épocas

              

               Almagro y Balvanera son dos barrios que están muy ligados a la historia. Sus edificios, calles, plazas, clubes deportivos y sitios de tango, hacen que el pasado esté constantemente presente en la vida de cada persona que pase por estos lados.

               Sin dudas, en estos barrios se pueden encontrar bares antiguos, con las clásicas escenas de décadas anteriores, en donde el olor a café y el ruido de las hojas del diario son cosa de todos los días. También, se pueden ver por todos lados murales de Carlos Gardel, eje fundamental del tango argentino que llenó páginas de periódicos de todo el mundo.

               Lo cierto es que en esta época, de poco serviría un barrio no desarrollado o perdido en el tiempo, por lo que hay que tener una cuota justa de cada parte, ya que tampoco sería grato tener un barrio sin historia.

               Almagro y Balvanera no sólo son exponentes actuales de la historia, sino que tienen una alta influencia de tecnología y actualidad. Las principales marcas del mundo tienen su lugar en el Shopping del Abasto, por ejemplo.

               Tampoco debemos olvidar al subterráneo, que fue pionero en nuestros barrios en la década del ‘30, lo que muestra que la palabra “actual” y nuestros barrios siempre fueron una buena combinación.

               Claro está que ni Almagro ni Balvanera son los únicos en tener esta condición, ya que Boedo, San Telmo, Villa Crespo, Caballito, y demás sitios, también podrían entrar en esta categoría de “barrios que combinan historia y actual”.

               Desde Primera Página seguiremos trayendo al tiempo presente a aquella rica historia, sin dejar de mirar y valorar la actualidad, la tecnología y el futuro.

Lucas Giannotti

Periodista

EL PARQUE DE LA ESTACIÓN EN TEATRO

 

EL PARQUE DE LA ESTACIÓN EN “TEATRO SIN TELÓN”

 



El Grupo de Teatro Comunitario Sin Telón trabajó e investigó sobre la historia de nuestro Parque de la Estación y puso todo ese esfuerzo para transformado en una obra sensorial holofónica que cuenta parte de aquella larga historia.

Esta representación en teatro, recrea aquella utopía nacida hace 21 años cuando unos pocos la comenzaron y se fueron incorporando muchos, hasta convertirla en un torrente que logró imponerse a la adversidad, las limitaciones y las dificultades y así plasmar un sueño en realidad.

Luego de soñarla un poco, es la primera piedra, nuestra obra que seguirán creando para luego darle vida con los cuerpos en el espacio en una segunda etapa sobre la historia del Parque y de la lucha que emprendieron aquellos pioneros en incidir popularmente en mejorar la calidad de vida de los vecinos.

Este grupo de teatro comunitario “Sin Telón” que nace en marzo del 2017, como un disparador para rescatar la memoria del barrio y darles un sentido de pertenencia a los vecinos, reúne todos aquellos relatos que involucran al barrio y los trasforma en piezas teatrales que se representan en la calle, codo a codo y trabajando en todos los aspectos del show juntos, en comunidad. Historias que le dan vida a un guión que nace en uno de sus ensayos, de forma colectiva, como suele suceder con cada obra que representan. Cada ensayo propone un ejercicio de improvisación diferente, donde al organizar los relatos, historias y personajes, se va tejiendo una ficción que se apoya en diarios e información aportada una vez más, en comunidad.

Luego de su debut, siguieron actuando en la tercera edición del Museo Vivo en el Abasto y varias funciones en la Plaza Almagro, ahora, recuperando la presencialidad, lo están haciendo con éxito en El Archibrazo de Mario Bravo 441, con las historias que deben ser rescatadas de la memoria de los barrios para que vuelvan a nacer en cada función… con cada aplauso.

 

https://www.archibrazo.org/eventos/historias-de-un-mientras-tanto-la-lucha-de-un-parque/




EL ARBOLADO PÚBLICO Y EL BARRIO

 

                                                          CALOS ANAYA


EL ARBOLADO PÚBLICO Y EL BARRIO

El artículo 26 o cómo construir un enorme tronco colectivo

 

Los árboles llevan sobre la tierra mucho más tiempo que nosotres: millones de años adaptándose a esa condición particular de estar atado a la tierra que los sustenta. Para sobrevivir han desarrollado maravillosos mecanismos adaptativos que les permiten crecer, desarrollarse, dar frutos o florecer, en algunos casos a lo largo de más de cien años (y hasta miles de años) en contextos climáticos muy diversos. Construyen la fortaleza y la flexibilidad de sus troncos aprendiendo a conocer los vientos. Han acumulado una enorme sabiduría milenaria.

El ingeniero Carlos Anaya es uno de los más reconocidos arboristas del país. Dio una charla sobre "Árboles, manejo y desadaptación" que puede verse en el canal de Youtube de Basta de mutilar nuestros árboles, la organización creada por iniciativa de María Angélica Di Giacomo para defender el arbolado. En esa exposición se pregunta "¿Por qué plantamos árboles en las ciudades?" Hay variedad de áreas en las que se reconocen los beneficios que nos proporcionan, pero él considera que el servicio principal es el vinculado a lo ambiental.

El cambio climático ("la variación significativa y persistente de la temperatura a lo largo de décadas"), la crisis climática, el calentamiento global, son distintos modos de referirse a la alerta que está poniendo en la agenda del mundo la necesidad de accionar en defensa de nuestro medio ambiente. Este cambio tiene consecuencias que en nuestra ciudad se expresan en el incremento de la temperatura media y el aumento en las precipitaciones, una mayor frecuencia de olas de calor y eventos de precipitación extrema.


                                      EL MALTRATO DE LOS ÁRBOLES

Los árboles cumplen una función clave en la disminución de la temperatura, en el atemperamiento de los vientos y en la lentificación de la caída del agua de lluvia, fundamental cuando se desencadena una precipitación intensa, para que no colapsen los desagües ocasionando inundaciones.

El arbolado de alineación (el que crece en las veredas) tiene un entorno muy diferente al de los árboles de parques o bosques. Las condiciones en las que crece son complejas: comparten el espacio con elementos de la vida ciudadana (edificios, cablerío, autos y colectivos, entre otras). Eso hace indispensable un cuidado atento y persistente por parte del Gobierno de la Ciudad, al cual lo obliga la Ley 3.263 de arbolado público.

Las políticas de arbolado requieren el análisis del conjunto del espacio que ocupa la ciudad, así como los datos del clima y de microclimas diferentes según zonas. Pero, además, un árbol nuevo requiere ser emplazado atendiendo, por ejemplo, a la línea en la que va a ser plantado, a si existen árboles que le van a hacer de barrera ante el viento o si está muy expuesto, a qué especies lo van a rodear, etc. En Buenos Aires es recomendable que sean árboles de hojas caducas, que nos brinden sombra en el verano y dejen pasar el calor del sol en el invierno. Es fundamental también un seguimiento intensivo los primeros tres años de plantado. Nada de esto ocurre en nuestra ciudad.

Recientemente las autoridades prometieron (prometieron) plantar 16 mil árboles este año. Según María Angelica Di Giacomo solo en la Comuna 5 faltan, por lo menos, 31 mil. Igualmente, señala, ninguna campaña de plantación es suficiente si no se pone el eje en conservar lo que hay. Así como el Gobierno de la Ciudad cuenta como Espacio Verde un "veredón", también cuenta como árbol tanto un plátano frondoso como un tronquito recién plantado. Desde ese punto de vista podemos suponer que la falta de árboles en términos de follaje es aún mayor. Cada plantera vacía o cementada que vemos al caminar por nuestra Comuna es el reflejo del fracaso de más de una década en la política de arbolado. Nuestros funcionarios deben rendir cuentas sobre qué hicieron con el mandato de la Ley 3.263 de "proteger e incrementar el Arbolado Público Urbano".

Dice la Constitución de la Ciudad que "El ambiente es Patrimonio común". En su artículo 26 dice también que "toda persona tiene derecho a gozar de un ambiente sano, así como el deber de preservarlo y defenderlo en provecho de las generaciones presentes y futuras". Nuestra Comuna, nuestro barrio, nuestra cuadra, es el lugar en donde empezar a cumplir el mandato constitucional. Es la forma de comenzar a fortalecer el tronco colectivo para hacerle frente a los vientos, construir una ciudad sostenible y un buen vivir para todxs.

Virginia Samar




CHARLES ROBERT DARWIN




24 de noviembre de 1859:

Charles Robert Darwin publicó “El origen de las especies”


La teoría de la selección natural

 

“Debemos pensar siempre por nosotros mismos, no debemos seguir ciegamente a nadie…

Es siempre recomendable percibir claramente nuestra ignorancia.

Sabernos ignorantes es el primer paso hacia la sabiduría personal…

Grande es el poder de la tergiversación constante…”

Charles Darwin

 

El origen de las especies de Darwin fue un importante aporte al mundo de la ciencia, la sociología y la filosofía, luego cada uno que la utilizó hizo un uso propio, caprichoso y antojadizo, del trazado fino de esa evolución.

Fue manipulada en beneficio propio de muchos, así es como se lo llega a calificar de “racista” y hasta la Alemania nazi hizo de aquella, leña para su fuego propio.

 

 

SU VIDA

 

Nació el 12 de febrero de 1809 en Sherewsbury, Inglaterra. Murió el 19 de abril de 1882, en Downe, Inglaterra. Es considerado el padre de la Teoría de la Evolución, una de las teorías científicas más importantes y de mayor trascendencia en la historia de la humanidad.

En 1809, la postura que explicaba el origen del mundo se basaba en la religiosa del “Génesis”, creencia que establecía que todas las especies habían surgido en el mismo momento hace 10 mil años. Muchos de los profesionales científicos aún estaban ligados a la iglesia y otros eran teólogos que realizaban sus investigaciones científicas durante su tiempo no dedicado a impartir la religión. Darwin era consciente que sus investigaciones se desarrollarían frente en una versión única de la ciencia teñida de creacionismo.

Sin embargo, sus trabajos fueron precursores de la literatura científica y el fundamento de la teoría de la biología evolutiva: el origen de las especies por medio de la selección natural, o la preservación de las razas favorecidas en la lucha por la vida.

                                            Galileo Galilei y su enfrentamiento con la iglesia Católica

Ya en su sexta edición de 1872, el título corto fue modificado a “El origen de las especies”. Darwin introdujo la teoría científica de que las poblaciones evolucionan durante el transcurso de las generaciones mediante un proceso conocido como selección natural. Presentó pruebas de que la diversidad de la vida surgió de la descendencia común a través de un patrón ramificado de evolución. Incluyó las pruebas que reunió en su expedición en el viaje del Beagle en la década de 1830 y sus descubrimientos posteriores mediante la investigación, la correspondencia y la experimentación.

Sin embargo, fue considerado racista, y como tal denostada su teoría por parte de los agraviados, y por supuesto por los sectores eclesiásticos que, fieles a sus concepciones religiosas, estaban imposibilitados de probar ningún hecho científico.

 

 

FILOSOFOS Y CIENTÍFICOS DE LA ÉPOCA

 

Copérnico, Galileo, Servet, Darwin, Einstein, Freud y Marx para mencionar apenas unos pocos, fueron denostados, perseguidos y humillados en su pensamiento en cada instancia de la evolución de la ciencia y la filosofía mundial. Sin embargo, aportaron lo suyo al largo y accidentado pensamiento universal, siempre condenados por las teorías tanto religiosas como agnósticas.

Engels, por ejemplo, de quien Marx dijera que era “el hombre más culto de Europa”, ni siquiera estudió en la universidad. No obstante, Marx y Engels produjeron una auténtica revolución copernicana en las humanidades y las ciencias sociales: luego de ellos, y aunque sea difícil separar su obra, podemos decir que después de Marx, ni las humanidades ni las ciencias sociales volverían a ser las de antes. La amplitud enciclopédica de sus conocimientos, la profundidad de su mirada, su empecinada búsqueda de evidencias que confirmaran sus teorías, hicieron que Marx, en su estudio sobre el carácter decisivo de la acumulación capitalista, estudiada como nadie más en El Capital, fuera negado por todo el pensamiento de la burguesía y por los gobiernos de esa clase, tantas veces dadas por muertas sus teorías, y su legado filosófico es más actual que nunca.

Podemos terminar diciendo que las teorías darwinistas fueron la llama que avivó el comienzo de ideologías y opresiones a grupos vulnerables; y son utilizadas como justificación a los mayores genocidios cometidos durante la historia de las sociedades humanas. Durante muchos años se intentó validar estas ideas, pero hasta el día de hoy no se encuentra ningún respaldo científico. Las razas humanas a nivel biológico son inexistentes y meras construcciones sociales. Por ende, cuando hablamos de razas solo podemos aplicar este término en el campo de la sociología ya que existe una jerarquización social por rasgos físicos y étnicos.

Las ideas de Darwin fueron recogidas por Ernst Haeckel, un doctor que en aquella época era desconocido, y rápidamente se propagaron por Alemania; acabando siendo material para Hitler y su pseudociencia nazi. Siguió al pie de la letra toda la teoría. Hitler planteó que la raza aria era superior a la judía y el resto de razas “inferiores” debían ser exterminadas por completo para impedir el “atraso evolutivo” de la sociedad. Esto concluyó en la muerte de seis millones de seres humanos en Alemania.

 

                                     DARWIN Y MARX
 

RAZA, SEXO, LIBERALISMO Y RELIGIÓN

 

El darwinismo social perdió popularidad como concepto supuestamente científico tras la Primera Guerra Mundial, y fue desacreditado en gran parte al finalizar la Segunda Guerra.

Los académicos debaten hasta qué punto las diversas ideologías darwinistas sociales reflejan las propias opiniones de Charles Darwin sobre las cuestiones sociales y económicas del ser humano. Sus escritos tienen pasajes que pueden interpretarse como opuestos al individualismo agresivo, mientras que otros pasajes parecen promoverlo.​

Los primeros puntos de vista evolutivos de Darwin y su oposición a la esclavitud iban en contra de muchas de las afirmaciones que los darwinistas sociales acabarían haciendo sobre las capacidades mentales de los pobres y los indígenas coloniales.

Tras la publicación de El origen de las especies en 1859, una corriente de seguidores de Darwin, liderada por Sir John Lubbock, argumentó que la selección natural dejaba de tener efectos notables en los seres humanos una vez que se habían formado sociedades organizadas.​

Sin embargo, algunos académicos sostienen que la visión de Darwin cambió gradualmente y llegó a incorporar puntos de vista de otros teóricos como Herbert Spencer, que publicó sus ideas evolutivas lamarckianas sobre la sociedad antes de que Darwin, tanto Spencer como Darwin promovieron sus propias concepciones de los valores morales. Spencer apoyaba el capitalismo del laissez-faire basándose en su creencia lamarckiana de que la lucha por la supervivencia estimulaba la superación personal que podía ser heredada.

 Muchos señalan que todo el mundo pensaba así sobre la raza y el sexo. Sí, pero Darwin fue capaz de pensar de una forma totalmente distinta bajo el prisma de la evolución y la selección natural. Tuvo experiencias con indígenas, con su propia hija que era la editora de un libro sobre el tema. Darwin, tiene una opinión negativa acerca de las mujeres, pero también estaba contra la esclavitud; era abolicionista, aunque también racista, según otras opiniones. El tema entra en una polémica aún no saldada hasta ahora por la historia.


 

DARWIN Y TROSTKY

 

En sus escritos sobre dialéctica, Trostky se refiere a la cronología del evolucionismo y lo menciona. Para él Darwin integra una larga trayectoria que permite pensar la dialéctica de los cambios a escala mundial: la teoría de Kant-Laplace sobre el sistema solar, la dialéctica de Hegel, la teoría sobre la evolución de la tierra de Lyell, la teoría de Darwin sobre el origen de las especies y la teoría de Marx. Trotsky escribía: la teoría de Darwin comenzó con la teoría sobre el origen de las especies y se convirtió en una teoría de la evolución del mundo orgánico. A Trotsky le interesaba explicar cómo la selección natural no es otra cosa que la acumulación de cambios cuantitativos, produciendo como resultado nuevas cualidades, nuevas especies.

Su innovación no consistió en señalar que sobrevive el más fuerte, idea que utiliza el darwinismo social para justificar el racismo, la xenofobia, la desigualdad social y el genocidio, sino demostrar que las especies cambian permanentemente, y ése es el principio fundamental de la teoría darwiniana, el resto es una utilización tendenciosa de las mismas.

Tanto Copérnico, Galileo, Servet, Darwin, Einstein, Hegel, Freud y Marx, aportaron una parte fundamental a la ciencia y a la filosofía mundial, según la época en que les tocó vivir, la controversia es inevitable, pero lo valorable es el aporte que hizo cada uno en esos campos.

 

Miguel Eugenio Germino

 

Fuentes:

--https://www.laizquierdadiario.com/Hace-160-anos-Darwin-publicaba-El-origen-de-las-especies

--https://www.agenciasinc.es/Entrevistas/Darwin-y-Galileo-intentaban-introducir-nuevo-conocimiento-en-el-mundo-y-eso-es-un-acto-politico

--https://www.pagina12.com.ar/diario/elmundo/4-189607-2012-03-15.html

--https://luisfelip.net/2016/03/10/apuntes-sobre-la-compleja-relacion-entre-marxismo-y-darwinismo/

--https://rebelionfeminista.org/2018/09/18/darwinismo-social-rebelion-feminista/