SALIÓ EL Nº 306 DE DICIEMBRE 2020 DE PRIMERA PÁGINA
Nació como medio alternativo en septiembre de 1993. Refleja la identidad y la historia de los barrios de Balvanera y Almagro, brindándo un instrumento de ayuda a mejorar la calidad de vida. En el año 200l recibió el Primer Premio de la “Orden Civil Heráldica de la Amistad”, entre más de 130 Barriales de Capital y Gran Bs As, además el Premio Mario Bonino UTPBA 2012, Palmiro Vanoli 2012 y 2014, y otros. Se lo encuentra en más de 350 lugares, y es de distribución gratuita.
domingo, 29 de noviembre de 2020
PRIMERA PÁGINA Nº 306 - DICIEMBRE 2020
PRIMERA PÁGINA- EDITORIAL AL Nº 306 - DICIEMBRE 2020
EDITORIAL
DICIEMBRE 2020 AL Nº 306
En los
números de octubre y noviembre pasado abordamos dos temas desestabilizadores,
instalados por la oposición y potenciados por los medios hegemónicos;
la mentira y el miedo, en este editorial abordaremos otro, promovido en los
últimos meses: el odio.
La mentira y el miedo pueden considerarse, aún dentro de
su carácter pernicioso, concepciones racionales, pensadas; en cambio el odio presenta
únicamente un perfil irracional.
Incentivado
por periodistas tristemente célebres, de ciertos canales de la TV (los más
vistos), así como de los editoriales de los diarios Clarín y La Nación que “manejan” la opinión pública, a su antojo, buscan instalar, si se cae en su prédica,
puerilmente estudiada, un verdadero canto de sirenas –pregonado por todos al unísono–, a fin de inducir a los buques en alta mar hacia los
escarpados acantilados a estrellarse ineludiblemente.
El odio, acompañado por otras connotaciones, como la
rabia, la ira, la agresividad, el racismo y la xenofobia, lleva
indefectiblemente a enfrentamientos de consecuencias impredecibles. El éxito
del odiador es lograr que la víctima también odie y lo dificultoso es lograr el
efecto inverso.
Si bien estas manifestaciones son muy sectoriales y
marginales, pueden llegar a potenciarse incentivadas por ciertos dirigentes
opositores –hoy
desplazados– pero que
intentan recomponerse para asumir el protagonismo perdido.
Además, de mantenerse éste en el tiempo, provoca la aparición
de complicaciones psicológicas e incluso físicas crónicas, tales como estrés,
ansiedad, pensamientos obsesivos, agresividad, debilitación del sistema
inmunitario, etc., aquellas personas que viven bajo el odio y el rencor, son incapaces
de sentir paz y tranquilidad. En ocasiones, consideran que las consecuencias
producidas en el ser odiado generan justicia, aunque el mayor daño se genera
sobre sí mismo cuando experimenta este sentimiento.
Sin dudas, un gran fomentador del odio es Jaime
Durán Barba, durante
muchos años personero a sueldo del Pro –otro gran talentoso en su profesión–, que se manifiesta un confeso admirador de Goebbels, cuando afirma en su libro “El arte de ganar” que: “el electorado está compuesto por simios con sueños racionales que se
movilizan emocionalmente. Las elecciones se ganan polarizando al electorado,
sembrando el odio hacia el candidato ajeno…”.
Sobre el mismo tema, Tennessee William manifestaba: “Creo que el odio es un sentimiento que sólo puede
existir en ausencia de toda inteligencia”, y Bertrand Russell aseveraba: “Pocas personas
consiguen ser felices sin odiar a otra persona, nación o credo”.
El odio conduce al miedo, estos tres elementos: mentira, miedo y odio, combinados, conforman un cóctel explosivo de efectos nocivos y perniciosos para la llamada
“democracia” que ellos preconizan, es un virus tan o más nocivo que el propio
Covid-19, al que muchos niegan y subestiman su existencia, incitando a manifestaciones, sin guardar el distanciamiento y utilizando mal el barbijo, lo que pone en serio riesgo al resto de la población.
Afortunadamente en el horizonte aparece en el corto plazo la vacuna,
varias vacunas, una tabla salvadora en el océano. ¡A no desaprovecharla!
Aunque
afloren en nuestro país, el mundo está cargado de posiciones de extrema derecha
que fueron reemplazando las opciones más moderadas, como por ejemplo en España,
que desapareció del espectro político el partido “Ciudadanos” y fue ocupado por
el extremista Vox, así como en Francia, Alemania y otros países europeos.
Hoy el gobierno parece recuperar la
iniciativa con la refinanciación de la deuda, las negociaciones con FMI, el
freno al dólar, el impuesto a las grandes fortunas, y comienzan a vislumbrarse
algunos signos de reactivación económica. Pero ¡ojo! que el Fondo siempre exige algo a cambio –“nunca olvida el ajuste”, directo
o indirecto, y todo ajuste pega de lleno en los sectores más postergados, básicamente
los jubilados– que desde siempre
fueron la variable de ajuste, dado que el sistema previsional es largamente deficitario,
no de ahora sino desde hace ya muchos años. Un tema de difícil solución, siendo
sus causas principales: el trabajo informal, “en negro”, la evasión impositiva, el monotributarismo,
y la mayor expectativa de vida de la población.
Y en ese sentido se vislumbra el proyecto que el gobierno enviaría al
Congreso para tratar en extraordinarias, todo régimen de actualizaciones que
excluya el tema inflación, conduce de por sí un peligroso “ajuste encubierto”
Los precios están descontrolados y se vislumbra un inminente ajuste de
tarifas, las que aumentaron en la era de Macri en más del 3.000%. Se haría
necesario estatizar nuevamente al menos el servicio
eléctrico.
La situación del país es compleja y crítica, pero es únicamente “el Estado” el llamado a ordenar los melones dentro del carro, para marchar
por el camino adecuado sin perjudicar a los sectores más postergados, ¡¡¡otro camino resulta peligroso!!!
Hasta
la próxima
EL PARQUE DE LA ESTACIÓN
El Parque de la Estación continúa en el gran
abandono
Malos vientos soplan sobre el Parque de la Estación. De la noche a la mañana fue cercado el
triángulo de Gallo y Díaz Vélez, sin cartel de
obra ni ningún conocimiento de la Mesa del
Parque, que parece estar “de adorno”.
Todos entendían que aquel triángulo de Díaz Vélez
y Gallo pertenece al complejo del Parque, ahora parece ocurrir algo distinto.
Aparte de la falta de concreción de la segunda etapa en los terrenos sobre
Bartolomé Mitre, ahora se pierden una cantidad más de metros cuadrados sobre la
calle Díaz Vélez.
Sergio Musikant, de Vecinos por el Parque pasó en varias oportunidades por el lugar, tomó fotos y se comunicó con la encargada de construcción de la
empresa Andariaga; al
parecer pondrían allí una
oficina de control de trenes, obra que se encuentra dentro del sector
destinado al Parque de la Estación, eliminando lo poco verde de ese lugar, y
según parece el acceso se hará desde el Parque,
o sea que quitará espacio verde. Esto se está
haciendo sin ningún tipo de consulta ni información a la Mesa de trabajo y consenso, que se desayuna con esta
situación consumada.
Es de esperar –antes de que sea tarde–
que la
entrada a las futuras oficinas, de las que no se prevé la magnitud, se haga en el sector donde está la pared, entre la cabina
eléctrica del parque y la escalera que pasa a la calle Bartolomé
Mitre, ya que el lugar del gomero es parte como
dice la Ley 5.734 del Parque.
Por otro lado, y
en una visita presencial al Parque por un cronista de Primera Página, se constató que desaparecieron todos los arbolitos
de los canteros de la parte central –que ya eran
demasiado pequeños–, ahora no queda ninguno
en toda la línea y nadie los repuso, por lo que
restará, aún más, la escasa sombra para el
próximo verano, haciendo insoportable permanecer
en el lugar.
Tampoco se pudo
contactar con los guardaparques encargados de la limpieza y desinfección de los
juegos con productos sanitizantes ¡es todo un bajón!
Más información en:
--facebook Parquedelaestacion
-- instagram @delparquedelaestacion.
COSTA SALGUERO
Un nuevo parque público en Costa Salguero
Un grupo de
organizaciones sociales, cátedras universitarias y vecinos de la Ciudad, y el
Observatorio del Derecho que integra Jonathan Baldivieso, declaran su
desacuerdo sobre cómo está concebida la ciudad y acceso que tienen los
ciudadanos al río, y que de prosperar el
emprendimiento de barrio privado se perdería. Es necesario comprender más
profundamente lo qué está sucediendo con los
predios de Costa Salguero.
Presentaron en la
Legislatura porteña un proyecto que busca derogar la ley que conformó el
Distrito Joven sobre la Costanera Norte y propone la creación de un parque
público en los terrenos de Costa Salguero, cuya venta fue frenada por la
Justicia porteña.
La iniciativa de la
creación de un parque público en los terrenos de Costa Salguero fue elaborada
por la Coordinadora “La Ciudad Somos Quienes la Habitamos” bajo el título
"Creación del Parque Público ´Nuestro Río´ y la desprivatización de la
Costanera Norte" y contempla al corredor lineal costero que va desde la
Ciudad Universitaria hasta el predio de Costa Salguero.
UNA DE LAS MUCHAS BICICLEADAS A LA ZONA
Por otro lado, la
propuesta incluye la derogación de la ley 5.961,
que fue aprobada en diciembre del 2017 en la Legislatura, para la creación del
Distrito Joven y la que dividió en cinco zonas el margen costero para la
instalación de locales gastronómicos y bailables, sitios de recreación y un
sector destinado a la construcción de edificaciones de hasta diez pisos.
Mientras tanto la Justicia volvió a dictaminar en contra del GCBA con
relación al tema, rechazando el recurso de inconstitucionalidad presentado por Larreta.
Consejo de Redacción
EL VIEJO HOSPITAL DE CLINICAS
El
viejo Hospital de Clínicas
Frente del viejo Hospital de Clínicas en 1883
Los problemas de la salud en la Ciudad
de Buenos Aires se remontan desde su misma conformación, dejando de ser una aldea
pueblerina hacia principios del siglo XIX. Con la llegada a estas playas de la Revolución Industrial (un siglo después
que Europa), hacia fines del de aquel siglo.
Están vinculados estrechamente a las
condiciones de trabajo y vivienda de sus habitantes, especialmente soportados por los sectores de menores recursos, en aquel entonces
el insipiente proletariado con jornadas de hasta 16 horas diarias y en condiciones
de escasa salubridad.
A ello se agregó el aluvión migratorio
y el rápido crecimiento urbano en la zona que hizo colapsar la provisión de agua
potable, quedando al descubierto el escaso equipamiento sanitario, cloacal y el
deficiente sistema hospitalario, justamente que dificultó el control de las enfermedades
infecto-contagiosas como la tuberculosis, la fiebre amarilla de 1858 y 1871, y las
de cólera de 1867, 1868 y 1895.
Los conventillos con sus escasas letrinas,
el Maldonado a cielo abierto, la escasa y mala alimentación, contribuyeron en agrandar el problema de salubridad.
En octubre de 1852 se elevó la Escuela
de Medicina a la jerarquía de facultad, que realizaba sus prácticas en el antiguo
Hospital General de Hombres, de San Telmo, aquel edifico se había ganado una lúgubre
fama por la precariedad y la falta de asepsia, que tornaban riesgosas las operaciones
más insignificantes.
FOTO DEL COMPLEJO HOSPITALARIO EN 1870
Muchos médicos, para evitar la llamada
podredumbre hospitalaria, optaban por alquilar habitaciones en el barrio para utilizarlas
como quirófanos.
El gobierno
de la provincia de Buenos Aires (del que dependía
entonces la ciudad), dispuso en 1870 la necesidad de la edificación de un nuevo
Hospital Escuela, con modernas instalaciones, airadas y delimitadas en pabellones
rodeados de jardines, todo un cambio cualitativo de encarar la medicina nacional.
Situado en los límites de Balvanera,
entre las calles Córdoba, Paraguay, Junín y Andes (hoy Uriburu), el nuevo complejo
edilicio fue conocido también como Hospital Buenos Aires u Hospital Nuevo y fue considerado entonces como un modelo de comodidad,
con salones amplios, dignos, modelo de su época, tanto
en la distribución de sus dependencias, como también su construcción, que estaba
inspirada en el hospital Friedrichsheim de Berlín y en el lazareto de Carlsruhe.
Es así que no difería mucho de los hospitales europeos y, sobre todo, de los de
París, marcando rumbos en la Medicina argentina.
Componían el complejo inicial cuatro pabellones
con techos de pizarra y paredes exteriores de tono amarillo, dispuestos en un jardín
de numerosas flores
y vistosas especies. Contaba con dos salas de cirugía con sus correspondientes quirófanos,
en una galería con aberturas para ventilación, ya que por entonces se creía que
la presencia de miasmas o emanaciones podrían afectar el lugar.
La inauguración se realiza en forma
forzada, al estallar entre el 18 y 20 de junio de 1880 el conflicto por la federalización
de Buenos Aires, convirtiéndose en el cuartel general, hospital de sangre y lugar
de concentración de heridos en los combates de Puente Alsina, Corrales y Barracas,
contribuyendo así a reducir el número de víctimas fatales de aquellas tristes batallas.
El 21 de agosto de 1883, el profesor
de Medicina y ministro de Instrucción Pública del gobierno de Roca,
Eduardo Wilde, entrega oficialmente el flamante hospital a la Facultad de Medicina,
tras la derrota de la provincia de Buenos Aires,
vencida por las tropas de la Nación.
Grandes figuras médicas pasaron por el mismo, entre
muchas otras: Pirovano, Posadas, Ayerza, Arce, Houssay,
Castex, Justo, Aráoz Alfaro, Ingenieros, E. Finochietto, Lanari, Cantón, Roffo,
Garrahan, Loudet, Chutro, Balado, Agote, Rojas, Pardo, M. Herrera Vegas, Padilla,
Brea, Santas, Fustinoni, de Robertis, Dassen, Cossio, Mazza, Escudero Ahumada, Carrillo,
R. Wernicke, Aguirre, Burucúa, Stoppani, y Cordero Aráuz, entre muchos otros médicos
afamados.
El hospital contará inicialmente con 250 camas,
y en 1910 pasa a 363 camas y el servicio de Cirugía General permitía alojar 185
pacientes de ambos sexos repartidos en tres salas; pero todo esto se consideraba
que era insuficiente para atender la creciente demanda del país, y de los extranjeros
que llegaban atraídos por el prestigio del Hospital.
Sin embargo, los problemas presupuestarios crónicos
del Hospital de Clínicas acompañaron desde siempre al desarrollo profesional de
sus integrantes. Muchas veces, profesores prestigiosos a cargo de una sala apuntalaban
con su representatividad y su propio patrimonio el exiguo presupuesto.
La Facultad de Medicina, que carecía muchas veces
de lugares adecuados para los cursos clínicos y quirúrgicos de sus alumnos, establecía
relaciones con los profesores exitosos para fortalecer la formación de los discípulos
en otros ámbitos.
El Hospital que en 1922 alcanzó las
500 camas y 656 en 1929, atendía cada vez más pacientes. De los 149.406 recibidos
en 1922, se había pasado en 1929 a 190.332. Y no había un presupuesto acorde que
acompañara este incremento. La falta de medios fue constante en el hospital, a pesar
del arancel que pagaban los pacientes, eliminado en 1948 y reimplantado nuevamente.
Desde comienzo del siglo XX, hubo propuestas para
construir un nuevo Hospital. En 1905 el arquitecto Gino Aloisi presentó un proyecto.
Desde entonces hubo numerosas iniciativas y propuestas de cambio de localización.
Hasta que en 1927 fue colocada la piedra fundamental del Policlínico General José
de San Martín (nombre alternativo para el Clínicas) para construirlo en la manzana
contigua de Av. Córdoba,
Andes (actual Uriburu), Paraguay y Azcuénaga. El monumental Hospital fue terminado cuatro
décadas después. En 1975 se comenzó la demolición del viejo Hospital de Clínicas.
Y en 1980 se inauguró en el lugar la Plaza Bernardo Houssay, con estacionamiento
subterráneo para 1.000 vehículos. Una más de las
aberraciones urbanas que dejó la Dictadura Militar, eliminando la absorción de los
terrenos parquizados, acentuando las inundaciones y convirtiendo las plazas en simples
maceteros.
En su centro se encuentra la Capilla de San Lucas, único edificio que se salvó de la demolición,
convertido luego en parroquia universitaria.
A modo de anécdota final sobre el viejo Hospital
de Clínicas vale recordar aquel triste día de 1937, cuando el escritor Horacio Quiroga,
internado en el lugar, al enterarse de su diagnóstico salió a la calle –en aquel momento era permitido la
salida de los internados–, fue a la farmacia, compró cianuro
y puso fin a su vida.
Miguel
Eugenio Germino
Fuentes:
-Lafuente
Machain, Ricardo, El barrio
de Recoleta, Cuadernos
Bs. As., 1960.
-Peña José y Madero Horacio, La administración sanitaria y la asistencia pública de Buenos Aires, Tomo II, Kraft, 1910.
-Recalde
Héctor, La vivienda popular en Bs. As., en Todo es Historia nº
320 de marzo de 1994.
-http://editorialalfredobuzzi.com/producto/historia-del-antiguo-hospital-de-clinicas-a-traves-de-sus-catedras-1881-1971/
-http://repositoriouba.sisbi.uba.ar/gsdl/collect/encruci/index/assoc/HWA_582.dir/582.PDF
EL BARRIO Y LA HISTORIA DE SU GENTE
Barrios que cuentan historias
Con sus ruidos de motor y bocinas habituales, los autos
pasan por Avenida Córdoba. A lo lejos, se escucha una frase que se destaca:
“no, me los olvidé. No puedo escuchar música, va a ser una caminata aburrida”.
Damián pisa el cordón de la vereda y por ende, el ficticio límite del barrio de
Balvanera. Siguiendo por Pasteur, empieza a oír algo extraño.
Damián: Disculpe señor, le veo cara conocida, yo lo vi en
algunos libros. ¿Es usted Bernardo Houssay?
Bernardo Houssay: Sí. Qué grata sorpresa. Estamos en el 2020
y aún la gente me sigue reconociendo.
D: ¿Cómo puede estar
pasando esto? En fin, ya que tengo a un ganador de Premio Nobel de Medicina debo preguntarle por la situación que estamos
atravesando.
BH: Pasó mucho tiempo
desde aquella distinción en 1947, pero tené fe que vamos a salir adelante, y
será pronto. Es más, allí viene otro al que le podés preguntar, Federico,
discípulo mío. Está justo pasando por la Amia, fundada en 1894.
Federico Leloir: Buenas
tardes, qué alegría encontrar a un gran maestro
con su joven amigo. ¿Hacia dónde van?
BH: A mi casa, sigo
derecho por Viamonte hasta Boulogne Sur Mer.
D: Yo sigo hacia el
límite de Almagro y Boedo, y voy caminando para dejar el transporte público a
quienes son esenciales.
FL: Los acompaño, voy
hasta mi ex Colegio, el Mariano Moreno, allí me esperan grandes compañeros para
saludarme, aún me siguen felicitando por mi Premio Nobel de Química ganado en
1970.
FEDERICO LELOIR
BH: No es para menos,
un gran orgullo, así como fue haberte vuelto a ver. Mi casa es ésta. Los dejo
que sigan su camino, aunque por lo que veo van a estar acompañados por un buen
tango, ¡miren quién está!
Carlos Gardel: Qué lindo ver tantas personalidades juntas en nuestro
barrio, ese que llevo en el alma, lugar donde se encuentra mi querido Abasto,
que brilla desde 1893.
D: Tu presencia es
una alegría enorme, y eso que aún no empezaste a cantar, sería muy gratificante
escucharte cantar “Mi Buenos Aires querido”.
CG: Bueno, será sólo
una estrofa, porque tengo que cuidar la voz para la función de esta noche. Fue
un placer haberlos cruzado.
D: Menos mal que me
olvidé los auriculares.
A paso firme, el médico y su nuevo amigo arribaron a un
espacio verde que captó la atención de ambos.
FL: Llegamos a Plaza
Almagro. Es tan linda que hasta vienen personas de otros países, mirá, allí
hay una mujer suiza.
Alfonsina Storni: Hola chicos, estoy muy apurada. No quiero llegar tarde a la escuela. Otro
día con más tiempo charlamos.
D: ¿Vas al colegio a
estudiar?
AS: No, voy a dar clases
en la Escuela Nº 13 DE
11. Es otra de mis pasiones, además de la poesía. ¡Hasta luego!
FL: Bueno Damián, no
pensé que a mi edad iba a poder seguir tus rápidos pasos, pero ya estamos en el
Colegio Mariano Moreno. Perdón por el desvío
de un par de cuadras. Allá están otras de las celebridades.
Ernesto de la Cárcova: Buenas tardes, soy pintor y fundador de la Escuela Superior de Bellas
Artes.
Homero Manzi: Un gusto,
joven. Soy poeta y guionista. No quería perder
la oportunidad de saludar a Federico, aunque me dirijo hacia Boedo.
FL: Entonces pueden
ir juntos. Fue un placer encontrarte Damián. No olvides usar el barbijo.
Minutos más tarde, en una calle con tan sólo dos cuadras
de extensión, Homero y Damián encuentran a alguien que estaba parado frente a
una planta.
D: Disculpe señor.
¿Qué hace?
Carlos Spegazzini: Lo que hice toda mi vida. Soy botánico y micólogo, y he descubierto
muchos avances con las plantas y los hongos. Aún recuerdo como si fuera ayer la
expedición BOVE en Tierra del Fuego. Tengan ustedes buenas tardes.
HM: ¡Muchacho! estamos
cerca del Oratorio San Antonio, de hecho, si afinás la vista, vas a
poder ver al cura.
D: Buenas tardes
Padre, quisiera hacerle una pregunta. ¿Qué se siente tener un club que lleve su
nombre?
Lorenzo Massa: Es muy
gratificante, hijo mío. Cada vez que escucho
“San Lorenzo” siento una sensación de felicidad inmensa. Se fundó justo aquí,
en donde estamos parados.
HM: Padre, ¿Se dirige
hacia Boedo?
LM: Así es.
HM: Bueno Damián, te
deseo mucha suerte. No dejes de cuidarte, que la salud es lo primero.
Al salir del
barrio de Almagro, Damián miró para atrás y sonrió.
Cada calle, sitio y personaje conocido lo acompañó desde su imaginación. Al
igual que él, todos los vecinos y vecinas de Balvanera y Almagro vivimos rodeados
de historia. Está en nosotros seguir recordándola.
Periodista
ESPACIO CREARTE
ESPACIO CREARTE – DON BOSCO 4124
FRENTE DEL ESPACIO CULTURAL
El arte como herramienta transformadora a nivel personal y social
La casa naranja situada
en Don Bosco 4124, barrio de Almagro, emite un resplandor mágico y
desbordante que alcanza a todos los transeúntes y vecinos. Es que nos
encontramos frente a Espacio Crearte -
Escuela de Teatro, un lugar comprometido en crear una voz propia colmada de
propuestas y cuestionamientos. Un sitio desprejuiciado, que invita al juego y a
la libre expresión. El Grupo Crearte surgió hace más de veinte años, siempre
dirigido por Cecilia Ruiz,
Licenciada en Dirección y Puesta en Escena. Durante mucho tiempo el grupo se
movió por distintos centros culturales de la zona de Almagro-Caballito hasta
que hace diez años consiguió tener casa propia, instalándose en el lugar que lo
cobija en la actualidad.
La escuela ofrece
talleres para niños (6-10 años), preadolescentes (11-13 años) y adolescentes
(14-18 años). En cuanto a los adultos, desde 2014 se brinda una formación
teatral de cuatro años. Cada año se trabaja un género específico. Así, en
primer año se desarrolla la Improvisación; en segundo, el Teatro del Absurdo;
en tercero, el Realismo y en cuarto, un Clásico. A fin de año cada curso plasma
lo aprendido en el montaje de un espectáculo que tendrá varias funciones. El
espacio también imparte diversos talleres y seminarios: Seminario Intensivo de
Iniciación Teatral, Seminario Intensivo de Teatro del Absurdo, Taller de Teatro
Físico, Máscaras y Ritmos Brasileños, y Taller de Yoga.
JUEGOS CON LOS CHICOS EN LA VEREDA
Espacio Crearte es mucho
más que una escuela de teatro, no se limita a la mera tarea de dictar clases.
La idea que sustenta el proyecto es la convicción de que el arte es una
herramienta profundamente transformadora, de comunicación, intercambio y
encuentro. Así lo explica Cecilia Ruiz: “Nosotros siempre pensamos el teatro como un
instrumento de transformación personal y social porque el hacer ficción te
amplía la mirada, empezás a ver reacciones de otras realidades que no son la
tuya. Inmediatamente tenés que adaptarte porque eso es lo que propone el
teatro, adaptarse a otras opiniones, de esta manera, inevitablemente empieza a
haber una transformación personal. Mientras tanto, también se produce una
transformación social a partir de esa mirada amorosa, esa mirada de sumar
diferencias, de ayudar al otro, esa mirada solidaria de aceptación. Por eso
decimos que la salida es colectiva, solo no se sale”.
CECILIA RUIZ ; Licenciada en Dirección y Puesta en Escena.
A raíz de la cuarentena
por la pandemia del coronavirus que determinó el cierre de la escuela desde
marzo, Espacio Crearte debió reinventarse como lo hicieron tantas otras instituciones
y actividades. En consecuencia, a partir de abril se comenzaron a implementar
clases virtuales bajo la sabia consigna de que el arte nos brinda herramientas
creativas que nos mantienen conectados a pesar del distanciamiento. El gran
objetivo es seguir encontrándose. El resultado fue positivo ya que siguió
ingresando gente durante todo el año. La última semana de julio el equipo de
docentes del espacio se reunió para reformular los contenidos de cara a la
nueva situación, se planificó el segundo cuatrimestre y en agosto se abrió la
inscripción para todos los grupos. Para cursar en la escuela el futuro alumno
debe pasar previamente por una entrevista personal para conocer sus
inquietudes, experiencias e intereses.
Durante la cuarentena
se impartieron algunas clases online gratis como las de Teatro Físico, Máscaras
y Ritmos Brasileños. Asimismo, hubo charlas virtuales en vivo con la actriz
Julia Calvo y el dramaturgo y director teatral Rafael Spregelburd. Además, se
realizaron dos ediciones online del denominado Varieté Crearte, que es la
muestra de diferentes escenas de los trabajos que están haciendo los alumnos en
cada curso.
Cuando le preguntamos a
Ruiz por qué decidió instalar la escuela en Almagro nos responde que “el
barrio nos pareció un lugar muy heterogéneo, muy cultural. Desde 2012
realizamos un evento –dos o tres veces al año–
que sirvió para nuestra inserción; se llama A Jugar en la Vereda. Comenzamos a
hacerlo porque cuando llegamos hubo varios incidentes de mucha violencia. En
vez de cerrarnos, decidimos llevar el arte y la cultura a la calle para
conocernos todos, saber quiénes somos, tolerarnos. Nos juntamos con los
vecinos, hay actividades para chicos, adolescentes, ‘vestimos’ la cuadra. Damos
un almuerzo y merienda gratuita, y siempre terminamos la jornada con un
espectáculo, una banda o un coro”.
TALLERES EN LA INSTITUCIÓN
El espacio organiza el
Festival Mundial de Teatro Adolescente “Vamos que Venimos”, que se celebra
desde 2009 en el mes de octubre y cuya fundadora y directora es Ruiz. Es un
evento en el cual se presentan espectáculos interpretados por adolescentes; hay
talleres de capacitación, charlas, foros, propuestas, durante ocho días. Vienen
grupos de todos los países latinoamericanos y de todas las provincias. Este año
hubo una edición online.
La escuela también
tiene su costado caritativo: colabora con Artistas Solidarios, una agrupación que
reúne bolsones de alimentos destinados a los artistas que se quedaron sin
trabajo. Espacio Crearte abre sus puertas los jueves de 14 a 16 para recibir
donaciones de los vecinos.
Los tres primeros fines de semana de diciembre cada grupo va a presentar el espectáculo en el cual estuvo trabajando durante todo el año. Se va a poder ver por Zoom, con una entrada muy accesible. Asimismo, en diciembre se van a abrir las inscripciones para 2021. Es muy probable que se dicten seminarios en febrero.
Laura Brosio