DEBATE PRESIDENCIAL DOMINGO 12
Si
faltaba alguna duda sobre los dos proyectos de plataforma explicita de cada uno
de los candidatos en el debate de ayer, quedó claro, manifiesto, categórico,
evidente, rotundo y tajante, las diferencias.
Pese
a los titubeos, desinformación y falta de preparación fueron expuestos dos proyectos
antagónicos:
Uno
el de Milei, de
neto corte privatista, anti Estado, ajustador, domesticado, por el Establiments,
que lo secunda, con su claro alineamiento internacional con Donald Trump, Thatcher,
hasta la ultraderecha israelí, de neto corte cipayista, esquivando el tema de la
soberanía sobre nuestras Malvinas. Se alineó con la dolarización, y privar al
país de una moneda y un Banco Central regulador.
El
otro el Massa;
llamando a aglutinar fuerzas y esfuerzos en un programa amplio, pero
manteniendo a “todos dentro”, rechazando el ajuste y que la crisis no la paguen
los más humildes.
A
la hora del balance, entre el “on y el off” la opinión fue unánime sobre la contundente ventaja del candidato de Unión por la
Patria, sobre todo en el primer tramo del debate, y en el flojo desempeño del candidato de
ultra derecha, al que se lo vio dubitativo, y de perder el hilo en ciertos
tramos, manteniéndose, casi siembre a la defensiva y hasta ceder la palabra en
un tema clave, como el de seguridad.
Gabriel Katopodis, que, fiel al estilo “todoterreno” que le imprimió a la campaña, salió
del Aula Magna de la Facultad de Derecho de la UBA para postular un balance
personal contundente, el que luego se volvió colectivo: "Quedó claro que en Javier Milei hubo más
balbuceos, más chicanas, más agresiones que propuestas. Un debate sirve para
poder contrastar, y aquí la comparación fue muy nítida y contundente a favor de
Sergio Massa".
El
final del evento dentro del Aula Magna, el clima fue celebratorio fuera de
cámara: los invitados de Sergio Massa se habían parado a aplaudir cantando "Massa
presidente", mientras que desde La Libertad Avanza se habían sumado al
mismo ritmo con "la casta tiene miedo". El doble festejo duró varios
segundos y sirvió para distender
tras dos horas con momentos de alta intensidad, en las que no hubo lugar para
el saludo entre ambos candidatos, pero también para marcar “las notorias
diferencias”
La
falta de reacción, tras ser acusado por plagio, que el economista ultraliberal no
muestra arrepentimiento ni negó haber copiado a otros, sino que se define como
un “divulgador”, cuando no brindó claramente “la fuente”. Después de que se
revelara que “gran parte de las columnas que Javier Milei publicó
en El Cronista son un plagio a los principales
autores de la Escuela Austríaca de Economía”. El candidato salió a atacar a
todos como autodefensa. "Solo
muestra lo nerviosos que están los muchachos de la casta política por el avance
de La Libertad Avanza”, atinó a decir Milei, acusando al oficialismo de
montar una campaña en su contra.
Ahora
ya en la recta final al ballotage, queda tras de sí, el tendal de
descontentos, de su propia tropa, y de los supuestos neutrales que rápidamente pasaron
a engrosar la lista de votantes a Massa, aunque digan, lo hacen: “por el mal
menor”.
Los próximos días serán definitorios, y “la militancia” no debe bajar la guardia, militar y convencer, incluso los inconvencibles y sobre todo fiscalizar firmemente hasta el último voto y hasta el último minuto, para consolidar el triunfo final y definitivo.
Primera Página
13.11.2023
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