EN LA RECTA FINAL DE LAS PASO
En pocos días tenemos que definir con nuestro
voto el destino futuro del país, en una situación que no resulta favorable para
el “Campo Popular”. La derecha envalentonada aprieta el acelerador
desestabilizador día a día.
Como en elecciones anteriores, aparecen
situaciones que tienden a producir malestar en la población. En esta
oportunidad además de los aumentos de precios, se dio un caso particularmente
sospechoso: la caída nacional del sistema en PAMI, con el consiguiente perjuicio
para los jubilados, que ya vienen golpeados.
Desde la dirección del PAMI, no se produjo un
comunicado que tranquilizara a este sector particularmente sensible, que suman
7 millones de potenciales votantes. Crecen las sospechas que se trató de un
sabotaje, el que debe denunciarse con firmeza.
Por otro lado, crece el nivel de violencia
opositor, situación que no se da en el oficialismo, que mantiene el temple, y
trata de resolver la “corrida cambiaria”, provocada más artificialmente que
real.
Ir a votar es un deber de todas y todos, ya que
no puede renunciarse al derecho, que pasa ser una obligación ineludible. No se puede
dejar el camino despejado para que los enemigos de la patria, continúen
haciendo daño, no dejan de dar muestras de cipayismo.
El espejo de Jujuy está fresco en el ambiente.
¡no dejemos que se generalice a nivel nacional.
¡Situación después difícil de revertir!
El domingo, todos debemos ir a votar por los
candidatos que defiendan los intereses populares, de los más necesitados, de
los trabajadores y jubilados, del pequeño comerciante, de los profesionales consientes,
de los trabajadores del campo y los pequeños propietarios que trabajan parcelas
arrendadas al terrateniente, demás debemos incidir al voto de nuestros amigos y
familiares.
Debemos votar por un arreglo rápido y justo de
la Deuda Externa, contraída por el gobierno anterior, con la complicidad de un
FMI, que prestó para la fuga y hoy no tiene en cuenta los estragos de la
pandemia, la guerra y la sequía.
¡Pagar, sí!, pero no con el sacrificio del
pueblo, especialmente del trabajador, sobre el que cae el perjuicio.
Se hace necesario una nueva contribución a las
grandes fortunas y rentas, y a los bienes en el extranjero, así como regular las
exportaciones en beneficio de todos y no de unos pocos privilegiados. Un estricto
control de precios, sancionando severamente la especulación y el abuso de
posición dominante.
Que el Domingo sea el comienzo de un proceso
que culmine con el ascenso al gobierno de un presidente patriota, que gobierne
para todos, y no para una oligarquía enquistada en el poder real desde hace ya
mucho tiempo. ¡¡¡QUE ASÍ SEA!!!
Primera Página: 7-8-2023
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