Barrio, comuna y abandono
Para dirigir una Comuna no basta con una ley y un funcionario “de turno” destinado a dedo, como es el caso de todos los “jefes” comuneros, que los eligió el jefe de Gobierno, y en especial el de nuestra Comuna 5 – Almagro-Boedo. Es el caso de Marcelo Bouzas, que con un autoritarismo que espanta, se considera el “Comisario del Pueblo”, y pretende manejar el Consejo Consultivo como si fuera un coto privado.
Lo peor es que aparte de su despotismo, para nada atiende los asuntos de la Comuna y los reclamos vecinalistas, que dicho sea de paso son muchos. Para colmo de males la sede de nuestra comuna se encuentra lejos del barrio, en Sarandí y Cochabamba, un lugar que además de estar a trasmano posee escasas comodidades para quienes se acerquen allí y se aventuren a efectuar algún reclamo o un simple trámite.
Veamos qué hace falta en la comuna. Por lo pronto, el arreglo de veredas que siguen en estado deplorable; el mejoramiento de luminarias, que en muchos sectores son apenas una media luz, como el tango; la reposición del arbolado urbano; el mantenimiento de la única plaza de la comuna, La Plaza Almagro, que deja mucho que desear. Como mínimo, después de cada lluvia quedan anegados los juegos infantiles. Falta también la instalación de baños químicos, que fueron colocados por escasos días y luego retirados.
El tema de la iluminación de la plaza es de lamentar. Periódicamente se producen apagones que perduran durante varios días. Además, cierran el espacio verde a las 19.30 hs., inclusive los domingos y feriados.
Para nada el Sr. Bouzas entiende en temas de ampliación de los espacios verdes. La Plaza Mariano Boedo se encuentra en terapia intensiva, en un lamentable atraso en su construcción. Ni que hablar del estado de situación del llamado Corredor Verde al Oeste que atraviesa de este a oeste la comuna.
En cuanto al proyecto Parque de la Estación, un tema que contribuiría a paliar en parte el amplio déficit de espacios verdes –0,20 metros cuadrados por habitante, cuando la OMS recomienda entre 10 y 15 metros por habitantes–, sigue igual. Un grupo de diputados nacionales está terminando de elaborar un proyecto de ley para presentar en el Congreso Nacional relacionado con tan importante obra, que tendría también incidencia en barrios vecinos. Es de esperar que el tema no se convierta en una nueva frustración para los vecinos de Balvanera y Almagro.
No es entonces descabellado opinar que la Comuna 5 padece de un gran retraso en la resolución de sus problemas, que hacen al correcto funcionamiento del barrio.
Sobre el déficit educacional, cabe recordar la infraestructura edilicia obsoleta, que privó durante el invierno de calefacción a los alumnos primarios y secundarios, además de ponerlos en serios riesgos por desprendimientos de mampostería. Además hay ventanas y puertas que no cierran y las viandas son de exigua calidad.
En el tema Salud la situación es aún peor, ya que la comuna no cuenta con ningún hospital. Los vecinos deben atenderse en el centro más cercano, que es el Hospital Durán, desde ya colapsado. Por otra parte, al Cesac Nº 38 de Medrano 350, lo mantienen en un grado de mínima atención, y lo privan de utilizar los pisos superiores, que por ley deben destinarse a Salud.
No es exagerado expresar entonces que la comuna 5 está en estado de abandono. Es de esperar la pronta elección de alcaldes y consejeros vecinales, proyectada para el 5 de junio de 2011, para que, junto al Consejo Consultivo Comunal que ya está funcionando, se constituyan en una verdadera democracia participativa.
Consejo de Redacción
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