DINA PIAZZA, RECTORA DEL IUINA |
La
vocación ligada a las actividades artísticas está en pleno auge en nuestro
país. Cada vez más los jóvenes le huyen a las carreras tradicionales y se
vuelcan a aquellas ocupaciones que se relacionan con las formas de expresión.
En este sentido, el Instituto
Universitario Nacional del Arte (IUNA) es un referente ineludible en el
tema: fue creado a fines de 1996 por un decreto del Poder Ejecutivo. El
proyecto tuvo por objeto transformar en universitaria la educación artística
dependiente de la Nación, radicada en la Ciudad de Buenos Aires; es decir que
se perseguía jerarquizar la formación en dicha área, reconociendo al arte como
generador de conocimiento.
El
IUNA es el resultado de la reunión de siete prestigiosos conservatorios,
escuelas e instituciones terciarias y superiores de artes que incluyen a la
música, las bellas artes, el teatro y la danza, a las cuales se incorporaron
las artes multimediales y la crítica de arte, entre otras disciplinas.
Se trata de una propuesta innovadora que procura aunar la teoría y la práctica,
apuntando a una formación integral.
Dentro
del IUNA existe el Departamento de Artes del Movimiento, con sede en Sánchez de Loria 443 que es heredero
del Instituto Nacional Superior del Profesorado de Danza María Ruanova. Se
aboca a las materias relativas a la
dinámica corporal, y ofrece los títulos de mayor alcance de la especialidad en
el país. La política institucional del Departamento está fundada en la
docencia, la investigación, las tareas de extensión y la producción artística.
La Decano Directora del Departamento, Lic. Diana Piazza, expresó en un
Encuentro de investigadores desarrollado este año, que antes del surgimiento
del IUNA en las escuelas tradicionales “estaba muy presente la sacralización de la
figura del maestro. Las acciones para trasmitir el conocimiento estaban más
centradas en la mímesis con el docente. No existía una fundamentación de
aquello que se impartía. En el IUNA hay una especie de tensión entre la
experiencia que traen los docentes provenientes de las escuelas históricas y
los provenientes de la universidad. Son ideologías diferentes: una se basa más
en la práctica y la otra en la reflexión crítica. La idea, desde la gestión, es
articular estas dos vertientes para que puedan trabajar en busca de objetivos superiores”.
En el
Departamento se pueden cursar distintas carreras. Por ejemplo pre-grado:
Tecnicatura en Interpretación en Danza, que tiene una duración de 3 años. Habilita
para el asesoramiento y participación en espectáculos de danza y para la experimentación
en la materia.
La
carrera principal es la de grado: Licenciatura en Composición Coreográfica, con
duración de 4 años y que se divide en mención Danza, Comedia Musical, Danza
Teatro y Expresión Corporal. Los egresados están preparados para desempeñarse
como profesionales en el área docente y del espectáculo, así como para ampliar
el campo teórico y de análisis de la danza y del movimiento. Con este objetivo,
los planes de estudio incluyen –además de los distintos tipos de danza- materias
como Expresión Corporal, Canto, Apreciación Musical, Acrobacia, Clown,
Escenografía, Iluminación, Vestuario, Guión y Producción de Espectáculos, entre
otras. En cuanto al área docente, se puede cursar el Profesorado de Artes en
Expresión Corporal o en Danza.
Para
ingresar a casi todas las carreras es indispensable aprobar una audición,
requisito para inscribirse al Curso Pre-Universitario de Admisión, que consta
de dos asignaturas prácticas -ligadas al movimiento y la música- y una
asignatura teórica, el Seminario de Sociedad, Cultura y Universidad.
Asimismo,
se dictan dos carreras de posgrado: Especialización en Tendencias
Contemporáneas de la Danza y Especialización con opción a Maestría en Danza
Movimiento Terapia: “Apuntan a fijar el
conocimiento, la necesidad de formación continua, la obsolescencia de los
saberes”, comenta Piazza.
Además,
la entidad ofrece otras prestaciones: cursos de extensión abiertos a toda la
comunidad; un programa de becas y pasantías; el Premio Estímulo a la Creación,
destinado a los alumnos avanzados; el Grupo de Experimentación en Artes del
Movimiento y ciclos de danza, jornadas y congresos. Un hecho para destacar es
que el IUNA tiene su propia Compañía de Danza integrada por estudiantes, quienes
pueden así dar amplia expresión a la
práctica escénica. Por otra parte, la Decano realza el manejo del Instituto de
Investigación de la entidad, que “tiene
un programa ambicioso por demás, con una continuidad en el tiempo remarcable,
lo cual genera espacios de formación para nuestros docentes”. La gestión actual
está interesada en que todas las áreas tengan un accionar dinámico. Por ese
motivo, en 2007 se creó la Unidad de Evaluación Institucional (UDEI) para
revisar aspectos como lo pedagógico, el cuerpo docente, los graduados, los
estudiantes y los diseños curriculares.
Laura
Brosio
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