HIJAS DE MARÍA AUXILIADORA

Instituto Hijas de María Auxiliadora

VISTA AEREA DEL EDIFICIO EN 1934

               Hacia finales del siglo XIX y en las primeras décadas del XX, unas tres manzanas del barrio de Almagro, con epicentro en Quintino Bocayuva e Hipólito Yrigoyen (donde se levanta el Templo de San Carlos), fue poblada con diversas congregaciones salesianas, entre ellas el Instituto Hijas de María Auxiliadora. El tronco común de tales congregaciones fueron los seguidores de Juan Bosco (sacerdote italiano, 1815-1888), continuador de la orden de la Visitación de San Francisco de Sales (prelado francés, 1567-1622).

Antes del año 1834, la Avenida Rivadavia (antiguamente Camino Real que conducía a los Reinos de Arriba - Alto Perú) observaba un curso oblicuo, ya que desde los Corrales de Miserere se desviaba por la hoy calle-avenida Hipólito Yrigoyen, para volver a unificarse en la Avenida La Plata.

El trazado recto de la avenida chocaba con varias quintas privadas, lo que suponía una solicitud de permiso de tránsito, además de la posibilidad de empantanarse en zonas bajas como la que es ahora   Urquiza - Jean Jaurés. Según el Plano Topográfico de Adolfo Sourdeaux de 1850, allí había un precario puente que servía para sortear el barrial.

Bordeando por Hipólito Yrigoyen se hallaba una extensa quinta de 18 hectáreas perteneciente al potentado comerciante portugués Carlos dos Santos Valente, quien a la altura de lo que hoy es la calle Maza, había levantado una capilla, consagrada a San Juan Nepomuceno. Ésta se  constituyó como el único altar para el culto del creciente vecindario de la zona. La popularidad de la quinta y la capilla era tal que se utilizaban como punto de referencia en las escrituras de propiedad de la época.

Hacia 1871, unas cuadras más al oeste, surgió la Sociedad Progresista Villa San Carlos, destinada al fomento de aquella zona de quintas, que auspiciaba la construcción de un templo. Los hermanos Estebarena donarán una porción de tierra de 61 x 35 metros, frente a la quinta de Tarragona, cuyo cerco avanzaba hasta el centro de la calzada formando un callejón que llevaría el nombre del donante, luego Artes y Oficios y hoy Quintino Bocayuva.

LA LLAMABAN "LA CASITA DE BELÉN"

A todo esto la Congregación Salesiana llega al barrio y levanta hacia 1878 el primitivo templo de San Carlos así como una escuela de Artes y Oficios. Pronto ambas edificaciones ocuparon toda la manzana comprendida por las actuales calles Quintino Bocayuva-Don Bosco-Yapeyú-Hipólito Yrigoyen. A falta de escuelas estatales en esta área de Almagro, se impulsó el auge de las de carácter religioso.

En el año 1879 llegaba a Buenos Aires la Congregación Hijas de María Auxiliadora, fundada en Mornese, Italia, el 5 de agosto de 1872 por Juan Bosco y María Dominica Mazarello. Intentan primero ubicarse en los terrenos comprendidos entre Billinghurst, Bartolomé Mitre, Sánchez de Bustamante y las vías del tren, que ocupan ahora la Iglesia y escuelas de Nuestra Señora de la Merced de Sión. Se sitúan entonces en Hipólito Yrigoyen y Treinta y Tres Orientales, y finalmente lo hacen en la esquina SE de Hipólito Yrigoyen y Yapeyú, contiguos al almacén de los Estebarena y a los terrenos de los padres bayoneses.

PLANO DE LA MANZANA EN 1878

De las instalaciones que había en el predio usaron un viejo rancho con techo de paja al que llamaron cariñosamente “El Ranchito de Belén”. Pero dada la estrechez del lugar y la imposibilidad de que funcionara un colegio ahí mismo, lo destinaron a la guarda de ropa de los niños pobres y de los salesianos.

La educación de las niñas estaba a cargo de la madre María Dominga Mazzarello, que usaba para ese fin un pequeño oratorio. No fue sino hasta 1879 y 1880 que compran un terreno lindero de un cuarto de manzana propiedad de los padres bayoneses. Allí construyen un salón-capilla que destinan para funciones múltiples. Pero maduraba la idea de expandirse, de manera que adquieren terrenos de la Escuela de Artes y Oficios de los salesianos, sobre Yapeyú 172.

Luego de recibir la generosa ayuda de Doña Petronila Rodríguez (riquísima dama de la sociedad porteña) y de Don Félix Frías, en 1882 se planta y bendice la piedra fundamental de la Iglesia y, el 6 de junio de 1883, las hermanas se mudan a la nueva casa de la calle Yapeyú. El edificio tenía dos pisos mientras que el templo era de una sola nave.

Para febrero de 1883 el lugar recibe a las pupilas; se había fundado así el primer instituto de la Orden en América.

Pero ya para 1887 las alumnas llegaban a 156, de modo que hubo que pensar en ampliar el inmueble. Se compró entonces un terreno sobre la calle Victoria donde construyeron un brazo del edificio de dos pisos y un corredor. El Instituto aumentaba cada vez más su población de pupilas, lo que siguió sucediendo por muchos años, de modo que debió ampliarse en varias oportunidades. Adquieren el terreno contiguo, perteneciente a la familia Garré, para levantar allí otro brazo del edificio, también de dos pisos. En 1889 obtienen un terreno más, esta vez hacia Don Bosco; en 1891 compran además los terrenos de la Quinta de Borzone, a lo largo de la calle Castro Barros, una superficie de 30 varas de frente por 60 de fondo (la vara mide aproximadamente 0,83 metros), a tan solo 12 pesos la vara cuadrada. Aquello fue una verdadera pichincha si se piensa que se trataba de un vergel de especies botánicas, de las que hoy se conserva solo una parte, la que asoma por sobre los muros del Instituto en la calle Castro Barros.

Asimismo, en 1892 se ensancha la capilla, con el agregado de dos naves laterales.

En el año 1900 se produce la separación jurídica del Colegio Pío IX por un lado, y por el otro de la Congregación, que alcanza su mayor impulso cuando se incorpora a ella la Escuela Nº 2 del Profesorado de Lenguas Vivas. Pronto se suman el 2º, 3º y 4º año Normal, en efecto, las aulas siguieron poblándose de estudiantes rápidamente. Durante el año 1923 se funda el Instituto Musical María Auxiliadora, y en la década del 30 se establecen clases de Física y Química, dictadas por una docente laica.

Por estos días el Instituto María Auxiliadora cuenta con un alumnado de más de 1.000 estudiantes, en sus cuatro niveles primario, secundario, terciario y capacitación docente, y ocupa la manzana completa entre las calles Castro Barros-Don Bosco-Yapeyú e Hipólito Yrigoyen.

 Miguel Eugenio Germino

Fuentes

-Archivo Central Salesiano, Don Bosco 4002.

-Bruno, Cayetano, Salesianos y María Auxiliadora en Argentina, tomo 1, Instituto Buenos Aires, 1989.
-LLanes, Ricardo M, “El barrio de Almagro”, Cuadernos de Buenos Aires, N° XXVI.

-Cunieti Ferrando J., Boletín Nº 7 Instituto Histórico Buenos Aires, año 1982.

-Cutolo, Vicente Osvaldo, Buenos Aires, sus calles, Elche, 1994.

-Archivos Municipalidad de la Ciudad de Buenos Aires, 1968.

-Periódico PRIMERA PÁGINA, nº 106, abril de 2003.

-Trueba, Carlos Manuel, Almagro, el pasado que perdura, Fundación Banco de Boston.