miércoles, 25 de junio de 2008

POR UNA VERDADERA LEY DE RADIODIFUSIÓN


POR UNA LEY DE RADIODIFUSIÓN QUE CONTEMPLE LA PLURALIDAD IDEOLÓGICA Y LA LIBRE EXPRESIÓN DE LA UNIVERSIDAD, LAS ORGANIZACIONES DE DERECHOS HUMANOS, LOS SINDICATOS, LOS MEDIOS ALTERNATIVOS Y A TODA EXPRESIÓN POPULAR QUE HOY SE LE LIMITA SU DERECHO A EXPRESARSE.

martes, 24 de junio de 2008

ARREGLOS DE VEREDAS EN BALVANERA Y ALMAGRO


DÍAZ VÉLEZ AL 3400 Y BUSTAMANTE


En los últimos meses, ante reiterados reclamos de frentistas por daños que ocasionan las raíces de añejos árboles que levantan las veredas, en los que debió intervenir la Defensoría del Pueblo de Buenos Aires, el GCABA comenzó la reparación de las mismas.

Claro que con la lentitud del caso, las obras se extienden en el tiempo, produciendo perjuicios adicionales a los vecinos, tenemos por caso las esquinas SO y NE de Perón y Gallo, donde las obras se extendieron por casi dos meses.

En el caso de los trabajos iniciados en Díaz Vélez al 3400, estos comenzaron a principios de junio y se mantenían paralizados al cierre de la edición del Periódico, ¿no es demasiado tiempo? En otras zonas del Balvanera y Almagro se reproduce la misma situación.

Otro tema: no se está reponiendo el arbolado urbano que para mejores resultados debe realizarse en la época invernal, ¿será olvido?

lunes, 16 de junio de 2008

A LOS 80 AÑOS DEL CHE...


EN EL 80 CUMPLEAÑOS DEL CHE: "HASTA LA VICTORIA SIEMPRE..."

sábado, 7 de junio de 2008

LAS COMUNAS NO VAN !!!


LAS COMUNAS NO VAN
¡¡¡LOS CONSEJOS CONSULTIVOS VECINALES YA!!!

La Ley Orgánica de Comunas, n° 1777 propende a “facilitar la participación de la ciudadanía en el proceso de toma de decisiones y en el control de los asuntos públicos […] Promover el desarrollo de mecanismos de democracia directa […] y consolidar la democracia participativa”.
So pretexto de falta de tiempo y alto costo de los sueldos que cobrarían los nuevos representantes por elegir, Mauricio Macri difiere la consulta pública para el año próximo, para juntarla con las elecciones legislativas, cosa que está expresamente prohibida por la misma Ley de Comunas (juntar elecciones con el consiguiente efecto de arrastre).
Desde ya el mismo sistema con que se eligen los comuneros -por medio de listas partidarias- crea una situación ventajosa para los grandes partidos y sus aparatos con capacidad financiera y funcionarios a disposición, lo que convierte la elección, la participación y la democracia directa, en una nueva utopía.
Los comuneros no deben elegirse en listas partidarias sino en una lista general por apellido del vecino, en el que el votante marque los siete de su preferencia. Otro sistema de elección podría ser el de Asambleas Soberanas de Vecinos.
Tal como están las cosas aquella elección se convertirá en una elección más, ‘más de lo mismo’. Sin embargo, mientras tanto se deben poner en marcha los Consejos Vecinales que la misma ley establece en sus artículos 33 y 34: “…Integrados por representantes de entidades vecinales no gubernamentales, partidos políticos, redes y otras formas de organizaciones en el ámbito territorial […] y vecinos en forma individual”.
Estos consejos se deben constituir ya, puesto que son honorarios, y deben entender en asuntos locales (sin grandes deliberaciones coloquiales) como: espacios verdes, falta de semáforos, veredas rotas, baches, limpieza, falencias edilicias en las escuelas, comedores escolares, deficiencias en la atención hospitalaria, etc.
Ésta es una gran asignatura pendiente de los últimos gobiernos y del actual; a ninguno de ellos le place compartir el poder y por eso dilatan y dilatan el tema comunas… pero ¿hasta cuándo podrán hacerlo?
Consejo de Redacción

LA UNIVERSIDAD TECNOLÓGICA NACIONAL


LA UNIVERSIDAD TECNOLÓGICA NACIONAL

PRIMERA UNIVERSIDAD OBRERA DEL PAÍS

Al promediar el siglo XX, cerca de la década del 40, el Barrio de Almagro comienza a transformarse. Dejará de ser el tradicional barrio campero de quintas, palacetes y mansiones, para aglutinar en su seno decenas y hasta centenares de clubes, teatros, templos, centros educativos y de salud y otras instituciones representativas, que le darán una nueva identidad.
Entre ellas sobresale la Universidad Tecnológica Nacional (UTN), primera Universidad Obrera del país, con sede central en Medrano 951.
Sus orígenes se remontan a los ideales de un grupo de profesores de la Escuela Industrial Otto Krause, que encabezados por el ingeniero Pascual Pezzano, entre 1935 y 1945, concibieron la creación de un instituto técnico superior altamente calificado, que llenara el vacío existente hasta entonces para los egresados de las escuelas industriales de segundo nivel.
Se operaba en esos años en el país un incipiente desarrollo industrial, y era imperioso formar mano de obra especializada en las distintas ramas de la producción, como consecuencia de la demanda mundial a partir de la Segunda Guerra Mundial.
En 1946, bajo el gobierno peronista, se crea la Comisión Nacional de Aprendizaje y Orientación Profesional (CNAOP) y se fundan las Escuelas-Fábrica, destinadas a la capacitación de operarios que no tenían la oportunidad de adquirir formación a nivel medio. Quedaba así abierto el camino para que en 1948 se fundara la primera Universidad Obrera del país, dependiente de la CNAOP e inspirada en el Instituto Politécnico Superior de Berlín.
En la Cámara de Diputados de la Nación serán 69 legisladores sobre 92, quienes levantarán su mano para hacerla posible. Los 23 restantes se opondrán a que los obreros e hijos de obreros pudieran capacitarse a nivel superior.
Nace así el 19 de agosto de 1948 la Ley 13.299, que crea aquel organismo nacional. Los más beneficiados inicialmente serán los técnicos egresados de escuelas industriales, que hasta entonces encontraban un techo en su formación, a causa de las limitaciones impuestas por las interminables equivalencias que estaban obligados a rendir.
Por aquel entonces sólo existían en el país cinco universidades nacionales: las de Buenos Aires, Córdoba, La Plata, Tucumán y Cuyo, a las que debía ingresarse con el título de Bachiller.
La Universidad Obrera inicia su funcionamiento recién el 17 de marzo de 1953, en un predio cuya transferencia se gestionó ante la Sociedad de Educación Industrial dependiente de Unión Industrial Argentina, sito en la Avenida Medrano 951. La inauguración estuvo a cargo del entonces presidente Juan Domingo Perón, allí funcionará el Rectorado Nacional y la Regional Buenos Aires.
La Universidad contó en un principio con cinco regionales: Buenos Aires, Córdoba, Mendoza, Santa Fe y Rosario que totalizaban 676 alumnos matriculados. En 1954 se agregaron las regionales de La Plata, Bahía Blanca y Tucumán y más tarde la de Avellaneda. El primer vicerrector sería el Ingeniero Pascual Pezzano, quien fue además el encargado de diseñar los planes de estudio.
Se inicia así en el país una nueva etapa, en la que el trabajador podría obtener una mayor inserción en el sistema educativo, con el siguiente ordenamiento:
-Escuelas de Artes y Oficios: correspondientes al ciclo básico de capacitación, con una duración de dos años y otorgamiento de certificados de estudio.
-Escuelas Técnicas de Oficios: correspondientes al ciclo medio de perfeccionamiento, también de dos años de duración, otorgándose certificado de Experto.
-Escuelas Industriales: correspondientes al ciclo de enseñanza media, con una especialización de tres años y el título de Técnico.
El destino siguiente será la Universidad Obrera Nacional, con acceso directo y gratuito, a través de un simple examen de ingreso sobre materias como matemáticas y física. El objetivo principal será la formación de profesionales de entre quienes se encuentren vinculados directamente a la producción. Egresarán con el título de Ingeniero de Fábrica, con especializaciones en electricidad, construcciones, hidráulica, metalurgia, electrónica, química, comunicaciones, administración rural, organización industrial, sistemas de información, y aeronáutica civil.
Debido a las especializaciones cada vez más profundas en diferentes disciplinas, se trabajó constantemente en cambios académicos y organizativos. Por Decreto nº 3014/52 se aprobó el reglamento de funcionamiento y organización interna.
Con el golpe de Estado de 1955, el gobierno militar de facto intentó desactivar esta Universidad Obrera, lo que fue resistido por el alumnado, que tras una larga lucha impidió el cierre de esta importante Casa de estudios.
Finalmente, por Ley 14855 del 14 de octubre de 1959, la universidad es refundada como Universidad Tecnológica Nacional (UTN). El 31 de agosto de 1962 la Asamblea Universitaria aprobará su primer Estatuto Autonómico, con el fin de “preparar profesionales en el ámbito de la tecnología para satisfacer las necesidades correspondientes a la industria, sin descuidar la formación cultural y humanística, que los haga aptos para desenvolverse en un plano directivo dentro de la industria y la sociedad, creando un espíritu de solidaridad social y mutua comprensión en las relaciones entre el capital y el trabajo.” (Artículo segundo del Estatuto)
Entre 1953 y 1997 se graduaron en la Universidad 37.000 ingenieros, y hoy llega a cobijar a más de 70.000 alumnos en sus 24 facultades y 5 unidades académicas, expandidas en casi todas las provincias argentinas, representando casi el 50% de los estudiantes de ingeniería del país.
En la actualidad se establecieron posgrados, tales como: doctorado en ingeniería y maestrías en ingeniería ambiental, higiene del trabajo, tecnología en alimentos e ingeniería en calidad entre otras modernas disciplinas.
En 1984 el Congreso Nacional, mediante la Ley 23068, produjo la normalización institucional de las universidades, severamente deformadas por las medidas que había tomado en todos los campos la dictadura militar, y en 1986 la Asamblea Universitaria de la Tecnológica eligió sus nuevas autoridades, haciendo uso de un régimen de autonomía que le permite autogobernarse.
La Universidad Tecnológica presenta dos características que la diferencian del resto del sistema universitario: tiene una estructura federal y su organización tiende a las ingenierías con carácter prioritario.
Miguel Eugenio Germino


FUENTES
-Granelli, Omar Pedro, Almagro y sus calles , Edición del autor, 2001.
-http://es.wikipedia.org/wiki/universidad_tecnol%c3%b3
-http://www.buscouniversidad.com.ar/universidad-terciario-utn-
-http://www.uarg.utn.edu.ar/info/resena.htm
-http://www.utn.edu.ar

27 DE JUNIO DE 1954 - DERROCAMIENTO DE ARBENZ EN GUATEMALA




27 DE JUNIO DE 1954

EL DERROCAMIENTO DE ARBENZ EN GUATEMALA

“Rebelión en el imperio del banano”

“Como el comunismo no es un asunto interno sino claramente internacional, su supresión, aun por la fuerza, en una nación americana, por una o más de otras repúblicas, no debe constituir una intervención en los asuntos de esa nación”.
Spruille Braden (1)

COPETE: El derrocamiento del presidente constitucional de Guatemala, Jacobo Arbenz, fue claramente promovido por los Estados Unidos desde su posición de supremacía a través de la United Fruit Company (UFCO) que llegó a controlar en aquel país el 40% de la tierra, la producción, el transporte y la comercialización del banano desde puertos propios.
Tras la destitución del dictador Ubico en 1944, surge en el país la llamada “Revolución Guatemalteca”, encabezada por jóvenes militares nacionalistas, entre ellos Arévalo y Arbenz, quienes emprenden profundas reformas —aún sin apartarse del proyecto liberal— que conmocionan el considerado patio trasero de los Estados Unidos, justamente en el inicio de la Guerra Fría.
La potencia imperial del Norte financiará desde Honduras y Nicaragua la contrarrevolución, valiéndose de mercenarios dirigidos por Castillo Armas, con la logística de la OEA manipulada a su antojo.

EL TRANSFONDO HISTÓRICO

Aún en la época de la Colonia, durante la “Capitanía General de Guatemala”, que integraba ésta junto a otras cuatro futuras repúblicas centroamericanas, dominaban en el espectro político regional los clásicos partidos liberales y conservadores. Los primeros representaban a los ideales de la revolución burguesa, mientras que los conservadores estaban encarnados por las tradicionales clases dominantes constituidas por terratenientes y grandes comerciantes.
Aquel esquema se mantendrá tras la emancipación de España en 1821, y luego durante la organización federal de cinco estados como Provincias Unidas de Centroamérica. En esa época se destacan dos figuras progresistas: el hondureño Francisco Morazán y el jefe del Estado de Guatemala Mariano Gálvez, quién desde 1831 representará las aspiraciones de una avanzada burguesía liberal, expropiando las grandes haciendas del clero y los antiguos realengos, y distribuyéndolos entre el campesinado.
Sin embargo, los grandes intereses y la poderosa clase dominante volverá al poder a partir de 1837 con la creación de la República Guatemalteca, cuando Rafael Carrera vence a Gálvez e instala una dictadura que durará 32 años. En 1859 Carrera firmará un tratado con Inglaterra, por el que entrega la soberanía de Belice, más de 22.000 kilómetros cuadrados, a cambio de un camino que nunca se construyó.
Hacia 1871 se inicia un régimen liberal que durará hasta 1898, cuando una nueva dictadura de 22 años, encabezada por Estrada Cabrera, da lugar a la penetración en gran escala de los monopolios extranjeros que explotarán el azúcar y el banano, y que controlarán en Centroamérica países enteros, dominando no sólo la explotación sino también el transporte y la comercialización desde puertos propios. Era un verdadero Estado dentro de otro Estado.
Guatemala será parte de esta triste historia contemporánea de indiscutibles relaciones semifeudales de producción, que se combina entre dictaduras y gobiernos complacientes.
Estrada Cabrera será El señor Presidente, el personaje del libro de Miguel Ángel Asturias. Tras el gobierno de Lázaro Chacón y el golpe de José María Orellana, entre 1921 y 1931, aparece la virulenta dictadura de Jorge Ubico, que se extenderá hasta 1944 y durante la cual la UFCO obtuvo concesiones hacia el Pacífico, llegando a dominar ambos océanos.
Los dos partidos tradicionales se unificarán en el “Liberal Progresista” (progresista de nombre). Serán 14 años de un reinado del terror en el país de los mayas. Por un lado se condonan deudas a los campesinos y por el otro se crean dos leyes: la de trabajo forzado y la de vagancia, que aplicarán al indio en un país de alta proporción de habitantes originarios; un complemento aterrador bajo la ominosa sombra y aprobación del Imperio, escondido tras un falso panamericanismo.
Pero como los pueblos insumisos se rebelan, estallará en junio de 1944 la llamada “Revolución Guatemalteca”, encabezada por jóvenes oficiales nacionalistas, que tumbará a aquel régimen de la más brutal explotación. En la revolución se destacan Juan José Arévalo y Jacobo Arbenz.

LA TIERRA Y LA “INVERSIÓN” EXTRANJERA

Detrás del concepto “inversión” se oculta en esta América difícil, un sinónimo de sumisión y entrega; la clásica inversión no es tal, sino una descarada intromisión extranjera de los estados poderosos en los países de estas latitudes. Países éstos que no son “pobres” sino “empobrecidos”, justamente por aquellas inversiones que se llevan mucho más de lo que traen e imponen cláusulas denigrantes.
Guatemala es un país con un 75% de población rural, en su gran mayoría descendiente de los mayas, que habitaban además Honduras y México, y que dieron origen a los pueblos quichés, cakchiqueles y mames, entre otros, pueblos que conservaban la propiedad común de la tierra. Con la Conquista se introdujo como ley natural la apropiación de la tierra en pocas y poderosas manos, lo que originó grandes latifundios. Tal situación se agudizó con la United Fruit Company, que para 1944 poseía cerca del 40% de las tierras cultivables del país, aunque apenas utilizaba la mitad de éstas; el resto eran territorios inexplorados o de baja productividad.

LOS GOBIERNOS DE ARÉVALO Y ARBENZ

De los 107 años de república transcurridos hasta 1944, cuando ocurrió la llamada Revolución Guatemalteca, el 20 de octubre de ese año, la mayor parte del tiempo se vivió en Guatemala bajo dictaduras y gobiernos autoritarios.
El nuevo régimen de Arévalo se integró a un proceso generalizado en América Latina en la década del 40, con gobiernos de nuevo tipo como el venezolano, el de Villarroel en Bolivia, de Perón en la Argentina y de Gaitán en Colombia, que promovieron una gran participación de movimientos de masas en la vida política y un retroceso de las clases dominantes, las que debieron resignar parte de su poder económico.
Juan José Arévalo, un ex profesor de la Universidad Nacional de Tucumán en la Argentina, es elegido presidente en una de las primeras elecciones verdaderamente libres de la historia de Guatemala.
La meta principal de su gobierno es la liquidación del antiguo régimen, para organizar un nuevo Estado capitalista moderno, democrático, con una perspectiva nacionalista y de defensa de los intereses públicos, sin pensar en establecer un sistema socialista, como le achacará rápidamente el Imperio, a fin de provocar su desestabilización.
En cambio, se implementan medidas populares que beneficiarían a los sectores más sumergidos y explotados de la sociedad, como la creación del código de trabajo, el reconocimiento legal de los sindicatos, el establecimiento del salario mínimo y la jornada laboral de 8 horas. Se creó el Banco Central, se lanzó una campaña nacional de alfabetización y se estableció la autonomía universitaria.
En 1949, tras abortar un alzamiento militar encabezado por Francisco Arana, ligado a los intereses ferroviario-bananeros, se produce una radicalización del proceso. El ejército leal y obreros armados facilitan una depuración de los sectores militares más retrógrados, momento que coincide con la elección de Jacobo Arbenz como presidente.
Los Estados Unidos, conscientes de la imposibilidad de doblegar, desestabilizar o corromper al nuevo gobierno, preparan una intervención indirecta, designando para tal fin un nuevo embajador, más ducho en esos menesteres imperiales, en una clara vuelta al llamado Big Stick (el garrote). La elección recae en Richard Petterson, quien declara descaradamente que su misión era “construir aquí en Guatemala un ejemplo de contención del comunismo y de las injusticias sufridas por las compañías norteamericanas en todas partes”.
Arbenz, lejos de intimidarse, formuló sus postulados básicos de gobierno: “Independencia económica, transformación del país en una nación capitalista y elevación del nivel de vida del pueblo”. Entre estos postulados, la reforma agraria desempeñará el papel más importante, se diversificará la agricultura para no depender únicamente del café y del banano, se propenderá a industrializar el país y a construir caminos.
En 1952, por medio del decreto 900, intentará liquidar la propiedad feudal de la tierra, con un programa similar al mejicano, pero sólo en las áreas no explotadas; no se tocarán los grandes latifundios productivos.

SE PREPARA EL GOLPE

A pesar de que en ningún momento Arbenz habló de pasar al socialismo, sus enemigos lo tildaron de comunista y de seguir las premisas de Moscú, también lo acusaron de que constituía un mal ejemplo para los demás países latinoamericanos.
El secretario de Estado norteamericano John Foster Dulles (que desempeñaba una changuita extra como abogado de la United Friut Company), su hermano Allan, que era director de la Agencia Central de Inteligencia (CIA) y el embajador Petterson, cumplirán un papel primordial en la desestabilización del país.
A fines de 1953, en la Organización de Estados Americanos (OEA), manejada por los Estados Unidos, se logra imponer una condena a Guatemala. Y en la Conferencia de Cancilleres de Caracas, en marzo de 1954, triunfa la tesis intervencionista ante los ojos azorados de un mundo que no logra detener la mano imperial.
Desde dos países sometidos, como Honduras y Nicaragua, preparan la invasión de mercenarios que reclutará el tristemente célebre militar guatemalteco Castillo Armas, y el 18 de junio de 1954 Guatemala es invadida por tierra, mientras aviones estadounidenses la bombardean.
El país apela al Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, y éste ordena el cese del fuego, pero la resolución es desoída. Una maniobra diplomática logra colocar el tema en la órbita de la OEA, y así encomiendan al zorro el cuidado de las gallinas. A pesar de ello, la invasión no logra establecer su cuartel general en tierra guatemalteca; si bien toman Puerto Barrios, son rechazados por milicias de campesinos y trabajadores armados.
Un nuevo embajador del país del Norte, Peurifory, consigue comprar a algunos oficiales traidores que dan un ultimátum a Arbens, al tiempo que desoyen la orden de entregar armas al pueblo. Arbens, tras un instante de vacilación renuncia, entregando el gobierno a Carlos Díaz, jefe de las Fuerzas Armadas, uno de los que había pactado con el embajador estadounidense.
Se forma una Junta Militar. Castillo Armas y sus mercenarios ingresan a la capital entonando una canción de guerra norteamericana. El nuevo régimen revierte totalmente la política progresista de Arévalo y Arbenz y obreros y campesinos son muertos o encarcelados.
Surge así en Guatemala una guerrilla que combatirá durante 36 años. Con un nuevo golpe en 1982, José Efraín Ríos Montt y su estrategia de tierra arrasada, dejará un espantoso tendal de 100.000 muertos, 40.000 desaparecidos, 250.000 huérfanos y 440 aldeas borradas de la geografía guatemalteca. Es fácil comprender entonces por qué “luchó y lucha Guatemala”, y por qué “lloró y llora Guatemala”.
Miguel E. Germino

(l) Braden, “lobbyista” estadounidense, jefe de Relaciones Públicas de la UFCO y embajador de los EE.UU. ante la Argentina en 1946.



FUENTES
-Galich, Manuel, Por qué lucha Guatemala, Elmer, 1956.
-http://es.wikipedia.org/wiki/Jacobo_arbenz_guzm%Aln
-http://todopormiguate.blogpot.com/2007/10/reportaje…
-http://www.elmundo.es/papel/hemeroteca/1996/10/26…
-http://www.inforpressca.com/infor2003/1515-10.htm
-http://www.telesurtv.net/escoñes/noticias/nota/24788…
-Ruibal, Beatriz, Arbenz, revolución en el imperio del banano, CEAL, 1985.

domingo, 1 de junio de 2008

PAPEL PRENSA Y EL GRUPO CLARÍN


PAPEL PRENSA Y EL GRUPO CLARÍN

No son casuales las críticas de numerosos sectores de la sociedad al monopolio mediático del grupo Clarín. Existen sobradas razones para sospechar de su función contra la “verdadera libertad de prensa” y en defensa de intereses y principios ignominiosos.
Todo comienza con el secuestro y desaparición por parte de la última Dictadura, de la familia Graiver, a quienes ésta además se apoderó de sus bienes, entre ellos una importante Empresa de fabricación de papel .
Los militares le asignaron el 33% al Diario Clarín y otro tanto a La Nación, el 33% restante quedó en manos del Estado. Se crea así Papel Prensa S.A.
Ya en Democracia, en lugar de revisar lo actuado por ésta, el Estado (por medio de Alfonsín), premia a estos dos diarios, asignándole el 50% a cada uno, nada se dice entonces de los supuestos negocios “non santos” de Clarín con la Dictadura.
El Gobierno de Menem, vuelve a premiar a Clarín, permitiendo el funcionamiento de los llamados “multimedios” (hasta entonces prohibido por ley), surge así el poderoso monopolio: Clarín, Radio Mitre, Canal 13, Todo Noticias, Volver, Torneos y Competencias, Patagonik Film, TV Pol-ka, Diario La Razón, Olé y la Agencia Diarios y Noticias. A ello se agrega hoy, el sospechado control empresarial del diario La Nación, por éste mismo pool.
Otro holding mediático la Compañía Inversora de Medios de Comunicación S.A. (CIMECO que maneja los principales diarios provinciales: La Voz del Interior de Córdoba, Los Andes de Mendoza y la revista dominical Rumbo, entre otros), pasó también a ser propiedad del grupo Clarín.
Desde “Papel Prensa” Clarín controla el precio del papel en bobina que consumen la mayoría de los diarios, revistas y periódicos del país, entre ellos el modesto periódico Primera Página que se vio así sacudido por un desproporcionado e injustificado aumento.
Si ésta es la libertad de prensa que algunos, (entre ellos la CIP) defienden, se marcha por el camino equivocado. Controlando el papel, la agencia, la prensa, radio, cine y TV, difícilmente exista una verdadera “Libertad de Prensa”.
Para colmo Néstor Kirchner le prorrogó por diez años la licencia a todos los medios. Entre ellos Clarín y Cia.
Néstor ¡¡¡Gravísimo error!!! Porque así paga el Diablo.