CORTES DE LUZ EN ALMAGRO Y BALVANERA ¿PARA
SIEMPRE?
SALGUERO Y DÍAZ VÉLEZ |
Nuestros
vecinos de Almagro y Balvanera
sufren una epidemia – que amenaza ser
crónica – con la provisión de energía eléctrica: Con frecuencia detestable el
servicio de electricidad se interrumpe sin aviso previo y por tiempo
indeterminado. Los afectados se quejan porque recuerdan un pasado horrible y
temen que éste vuelva a repetirse porque
durante cierto tiempo, lo habían olvidado. Se distinguen dos tipos de “cortes
de luz”: los programados y los sorpresivos.
El
pasado de los cortes de fluido programados, debidos a la escasez de generación
y/o transmisión ya no es de temer, puesto que las capacidades involucradas han
sido previstas y satisfechas por el Ministerio de Planeamiento en todo el país
y particularmente en el Área Metropolitana ¿Cuál es entonces la causa de estos
cortes de luz sorpresivos? La causa es
la falta de inversiones de las compañías que acercan el fluido eléctrico a los
usuarios, EDENOR y particularmente EDESUR, y ha provocado la obsolescencia
y falta de mantenimiento de los equipos que atienden al servicio de
distribución hogareña de los vecinos de la
Ciudad de Buenos Aires y su Conurbano.
Esta epidemia no carece de enfermos, pues esta
situación no sólo ocurre a causa de furiosos temporales ó altas temperaturas
con que el Cambio Climático castiga a los vecinos en verano, sino que
refiriéndonos precisamente a la reversión del Cambio Climático, ésta se
consumará por el cambio de Matriz Energética y la provisión de energía será
eléctrica, convertida en tal por las energías “limpias”. Por ejemplo el
transporte automotor actual, responsable
del 30 % de la emisión de gases de “efecto invernadero” será sustituido pronto
por automóviles, camiones y ómnibus eléctricos, tracción ferroviaria eléctrica,
una red de subterráneos urbanos eléctricos. Obviamente esto obligará a reforzar
la provisión de electricidad en todos y cada uno de los centros de consumo
existentes en nuestro país.
Pero esta energía eléctrica incrementada se
deberá transmitir desde sus limpios potenciales de generación hasta los centros
urbanos de consumo, por ejemplo desde la Patagonia y el NEA al Área Metropolitana, y será
necesario reemplazar los oleoductos y gasoductos por líneas de transmisión de
fluido eléctrico con pérdidas mínimas. Aquí la tecnología acudió en nuestra
ayuda. La Corriente
Continua de Alto Voltaje (HVDC por sus siglas en inglés) es el instrumento
para transmitir gran potencia a mucha distancia. Hoy los suecos han logrado
diseñar, construir y probar un transformador de Alterna a Continua de 1.100.000
voltios, posibilitando trasmitir 10.000 megavatios (millones de kilovatios) a
una distancia – económicamente escogida – de hasta 3.000 km. Para dar una
idea de la magnitud de esta potencia, toda la demanda eléctrica actual máxima
de la Argentina
no supera los 23.000 megavatios..
Pero
no solamente ellos lograron el transformador desde corriente alterna hasta continua de 1.100.000 voltios y viceversa.
Diseñaron, construyeron y probaron un interruptor en Corriente Continua de Alto
Voltaje capaz de desconectar – a
1.100.000 voltios – voluntariamente por medio del disparo electrónico de
comando, ó en forma automática ante una falla de seguridad. Con ese interruptor
es posible construir una red de interconexión entre centros de demanda,
posiblemente de ciudades, y los puntos de oferta de energía “limpia”
maximizando convenientemente la eficiencia del sistema.
A esta forma de
operar se la denomina “en red” y es habitual con la corriente alterna
convencional. Permitirá explotar a fondo el potencial eólico de la Patagonia, estimado por la Agencia Internacional
de la Energía
en la increíble cifra de 300.000 MW, parcialmente estabilizado por el aporte de
Energía Hidráulica de ese origen. Lo que es necesario advertir es que todo esto
costará mucho dinero y tomará mucho tiempo para llevarlo a cabo.
Tenemos la energía
eólica, necesitamos los molinos aerogeneradores; tenemos el potencial
hidráulico, deberemos construir las represas tanto en la Patagonia como en el
NEA; tendremos entonces la energía eléctrica y necesitaremos llevarla a cada
casa, a cada edificio, a cada industria y comercio, de las barriadas de Almagro
y Balvanera. Más aún, necesitaremos construir una red de estaciones de carga
para los automóviles, camiones y ómnibus eléctricos.
Los argentinos deberíamos emplear grandes
recursos financieros: La energía no nos insumirá costo alguno, excepto el del
personal para operarla, pero aquellos que causaron el Cambio Climático con sus
exageradas emisiones de gases de “efecto invernadero” deben ayudarnos a
instalar los equipos necesarios para el cambio de Matriz Energética, necesario
para revertir las concentraciones de dióxido de carbono y de metano en la
atmósfera de todo el Planeta, porque lo haremos sin desatender la salud, la
educación, la vivienda, y todos los demás Derechos Humanos de los que pisen
este suelo, “para nosotros, nuestra posteridad y para todos los que vengan a
vivir en la República Argentina”.
Incluso por supuesto, los vecinos de Almagro y Balvanera
Los “cortes de
luz”, tanto los programados como los sorpresivos, serán entonces un ingrato
recuerdo para los vecinos de Almagro y Balvanera, así como también los feroces
temporales de lluvia, viento y granizo, los calores insoportables en verano y
los rigores extremos en invierno, todos agravados por el Cambio Climático.
Ing. Ernesto Mario Leikis
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